Carles Aleñá está en una situación muy complicada en el FC Barcelona, apenas impensable cuando inició LaLiga Santander como titular en San Mamés. Ernesto Valverde, visiblemente enfadado con el canterano en ese partido, le retiró en el descanso y no le ha dado ni un solo minuto más de juego, dejándole fuera del equipo en la mayoría de convocatorias.
Estas circunstancias sumadas a la evidente calidad y juventud del futbolista hacen que ya hayan aparecido sus primeras 'novias' en el mercado. Si hace unos días apuntábamos que el Real Betis ya se habría interesado por el centrocampista de Mataró, ahora parece que es el Tottenham el equipo que le contempla como posible refuerzo en invierno.
En especial, porque Christian Eriksen termina contrato el próximo verano, se niega a renovar, y el club londinense podría acabar vendiéndole en enero -posiblemente al Real Madrid- para sacar algún beneficio económico y evitar perder a su estrella a coste cero. Según las informaciones publicadas por Mundo Deportivo, Mauricio Pochettino, técnico 'spur', piensa en Aleñá para relevarle.
Dicho medio de comunicación apunta que el entrenador argentino siempre ha tenido muy presente al canterano azulgrana y que habría visto una gran oportunidad de llevárselo dada su situación en el Barça. A sus 21 años, Aleñá tiene un gran futuro por delante después de haber sido un referente en las categorías inferiores del FC Barcelona.
Las claves de la posible marcha de Aleñá
Eso sí, habría que ver cuál será la estrategia del club azulgrana para Aleñá. Es cierto que no está teniendo protagonismo con Ernesto Valverde, pero también hay que tener en cuenta que el futuro del técnico extremeño en Can Barça tampoco es seguro a medio plazo. O, dicho en otras palabras, podría llegar a ser un error desprenderse de una clara apuesta de club nacida en la Masia por el simple hecho de no gustarle al técnico actual.
Eso sí, la situación del centrocampista catalán es complicada y ya no es nada descabellado pensar en un más que posible cambio de aires en enero. No obstante, una cesión o una venta con opción de recompra ganarían fuerza como alternativas, ya que permitirían tener monitorizado a un futbolista del que se espera mucho de cara al futuro.