En los despachos del FC Barcelona están muy atentos a los candidatos para el lateral derecho. El club necesita un jugador de garantías que pueda complementar el ataque por banda de los extremos y también retener las avanzadas rivales en defensa. Hay varios nombres sobre la mesa pero hay uno en específico que Deco de Souza tiene varios años monitorizando.
Hoy en día el que más suena es Iván Fresneda. El zaguero del Valladolid tiene una cláusula de rescisión valorada en 20 millones de euros pero los azulgrana creen que podrán reducir el precio de la operación en los próximos días. Xavi quiere un perfil natural para el costado diestro y entiende que Jules Koundé quiere hacerse hueco en la dupla central junto a Ronald Araújo.
Vanderson, objetivo 2024
Si bien Fresneda es una opción 'low cost' que puede dejar un gran rendimiento en el Barça, lo cierto es que el área deportiva está tras los pasos de Vanderson de Oliveira como lateral a largo plazo. El brasileño ha estado en la órbita de Deco desde que era futbolista del Gremio pero en ese entonces los culés tardaron en mover ficha y recaló en el AS Mónaco de la Ligue 1.
Thiago Scuro, director deportivo del conjunto monegasco, le ha marcado como intransferible para este verano y todas las ofertas que llegue sobre su mesa terminarán en una vía muerta. Esto encaja a la perfección con la planificación del Barcelona, quienes tienen pensado hacer un movimiento por él en 2024 ya que su ajustada situación económica han impedido cualquier avance durante este mercado.
Vanderson quiere ser culé
Eso sí, Deco ya ha comenzado a trabajar en su incorporación y el propio Vanderson vería con buenos ojos vestir de azulgrana como un salto importante en su carrera. El defensor entiende que la apuesta del club por laterales brasileños en las últimas décadas le convierten en una opción prioritaria, algo que también le ayudará a afianzarse en la Seleçao de cara a las eliminatorias para el Mundial de 2026.
La sintonía de todas las partes es plena y confían en que al final de la temporada volverán a cruzar sus caminos, esta vez de forma definitiva. A sus 22 años, viene de disputar 39 partidos en todas las competiciones donde anotó un gol y repartió cinco asistencias. Su valor de mercado oscila los 20 millones de euros, pero se espera que en Mónaco no le dejen salir por menos de 35 'kilos'.