Nico González finalmente ha logrado 'explotar' en el Oporto después de un comienzo lento con el equipo de Sergio Conceiçao tras su fichaje de verano procedente del FC Barcelona. El centrocampista optó por marcharse en verano, en busca de minutos de juego, y el equipo azulgrana le vendió por 8,5 millones de euros, pero se quedó con un porcentaje de cualquier transferencia futura y una cláusula de recompra.
Nico había sido señalado durante su etapa final en la Masia como un posible sucesor de Sergio Busquets, pero una variedad de circunstancias hicieron que nunca tuviera la oportunidad. De hecho, Xavi Hernández dijo que veía a Nico como un jugador "más ofensivo" que Busquets, citando a Frenkie de Jong como ejemplo, y lo dejó marchar antes de fichar a Oriol Romeu del Girona.
El Barça podría solucionar su problema en el pivote con otro canterano
Ahora que el fichaje de Romeu simplemente no ha funcionado, y con Andreas Christensen jugando ahora en el centro del campo, no luce demasiado complicado que Romeu volviera al Girona al final de la temporada. Eso deja al Barça todavía buscando un pivote y con muy poco dinero para gastar en el mercado de fichajes, tal y como están las cosas.
Eso pone a Nico, de 22 años, como una posibilidad para el club catalán, sobre todo ahora que se está asentando en el Oporto, siendo titular en cinco de sus últimos seis partidos, y llamando la atención de muchos en la victoria del equipo portugués sobre el Arsenal en la Liga de Campeones. Incluso el propio Oporto elogió a su "Maestro" tras la victoria en el partido de ida de su eliminatoria de octavos de final (1-0).
El posible precio de Nico, un gran problema para su regreso
El mayor problema para el jugador, y para el propio Barça, es que las informaciones el pasado verano señalaron que la opción de recompra estaría fijada en unos 30 millones de euros para este próximo verano, lo que significa que aún podría ser difícil de negociar, incluso si el conjunto culé decide que quiere darle otra oportunidad a Nico.