En el FC Barcelona se avecinan días decisivos que pueden 'marcar' el futuro del club en varios aspectos. El tema de la camiseta (y patrocinador oficial) es el principal punto en la agenda de la directiva de Joan Laporta, pero la resolución podría llegar muy pronto. La relación con Nike está más 'rota' que nunca y la crisis se ha intensificado en los últimos meses y desde el club hay muy poco optimismo con respecto a la posibilidad de que se mantenga el vínculo. 

En los últimos días se ha producido un aluvión de informaciones con respecto a lo que pueda pasar en el Barça y todo parece indicar que, durante la próxima semana, se definirá la hoja de ruta rotunda con respecto al tema de la camiseta. 'SPORT' ha apuntado que el club estaría a punto de poner punto y final a la alianza con la empresa multinacional estadounidense, que comenzó en 1998. El malestar ha ido en aumento  y sería la decisión definitiva por parte del club, aunque buscarán un adiós amistoso. 

BLM sale al paso para el Barça

El medio establece que, tras las últimas reuniones con Nike, la entidad catalana está valorando la posibilidad de crear su propia marca de camisetas, a través de Barça Licensing & Merchandising (BLM), la sociedad que se creó en 2018 para que el club fuese capaz de explotar el negocio de la comercialización masiva de productos ('retail'), con el objetivo de que pudiese expandirse la marca Barça. En la actualidad, se producen muchas piezas que están a la venta en la 'store' culé, aunque no hay que pasar por alto que en 2022, la Asamblea General de Socios aprobó la venta del 49,9% de BLM, como parte de las famosas palancas económicas. El club, pese a contar con luz verde de los socios, no ejecutó la operación.

Ahora, la intención de los culés sería elaborar sus propias indumentarias y asociarse con una multinacional que se encargue de la fabricación y distribución de las piezas. La otra alternativa sobre la mesa es Puma, aunque las negociaciones se han enfriado y, de hecho, según se apuntaba en los últimos días la marca alemana se había sentido 'usada' por los culés para intentar negociar y acercar posturas con Nike para la mejora del contrato. 

Problemas legales probables para el Barça

En cualquier caso, el Barça está a la espera de una nueva comunicación por parte de la marca deportiva y, en caso de que no hayan mejoras al contrato actual -que supone 85 millones de euros por temporada-, romperán la vinculación. El objetivo es que sea amistoso, pero son conscientes de que Nike les demandaría por incumplimiento de contrato. Como explican desde 'SPORT', ""hasta que hubiese una sentencia, los auditores podrían obligar a la junta directiva del club a provisionar una importante cantidad en este concepto, algo que provocaría un problema en los siguientes presupuestos del FC Barcelona".