En las oficinas del Camp Nou no se ha detenido el trabajo y son muchos los 'pendientes' que están sobre la mesa. Además de los fichajes que prepara Joan Laporta, también es necesario resolver el tema de los jugadores que terminan sus contratos próximamente, incluido Leo Messi, con quien todavía el club no ha llegado a un acuerdo para conseguir su estadía en la Ciudad Condal más allá del 30 de junio de este mes.
Lo cierto es que es muy probable que el Barça esté a la espera de la decisión final del capitán para ponerse manos a la obra con el resto de los jugadores que terminan contrato con el club en el 2023 porque, si bien es cierto que Messi es el principal protagonista del equipo, de su continuidad dependerá otras tantas cosas en la entidad azulgrana (y de los resultados de la auditoría económica).
A pesar de eso, el club debe resolver la situación de sus jugadores porque, si no se renuevan sus acuerdos, habrá que ponerlos en el mercado y, como están las cosas, no será una tarea sencilla. Apartando a Leo Messi, hay hasta seis jugadores cuyas carpetas están en el despacho de Joan Laporta a la espera de la decisión del máximo mandatario culé con respecto a su continuidad.
Las renovaciones de los 'cracks'
Comenzando con las dos grandes joyas del Barça, Ilaix Moriba y Ansu Fati, cuyos contratos vencen en el verano de 2022. En el caso del centrocampista la situación es delicada porque la primera oferta del club no gustó a sus agentes, económicamente hablando. Los culés deben encontrar una fórmula para atarlo porque ya son varios los clubes que se han interesado en su ficha, sobre todo en la Premier League.
En el caso de Ansu Fati la situación es diferente. Es una renovación 'segura', pero que no ha comenzado a negociarse. Habrá que ver cuáles son las intenciones de Laporta y compañía a sabiendas de que Ansu ha estado de baja desde el pasado mes de noveimbre, cuando sufrió una lesión en el menisco en un partido ante el Real Betis. El club lo quiere, pero su físico (y recuperación) puede jugar un papel clave.
El Barça también tiene pendiente la renovación de Pedri González, cuyo contrato también vence en el 2022. El centrocampista se ha revalorizado (incluso más) en la Eurocopa y, aunque su intención es seguir vistiendo la elástica azulgrana, en el Camp Nou tendrán que renovarle de inmediato para evitar que otro equipo quiera insistir en su fichaje.
Culés en el alambre
Hay otros tres jugadores que terminan su contrato en el 2022, pero que podrían salir del Barça: Konrad de la Fuente, Ousmane Dembélé y Sergi Roberto. En el caso del extremo norteamericano, su traspaso al Olympique de Marsella por 3,5 millones de euros está prácticamente cerrado. Konrad firmará por cuatro temporadas y el conjunto azulgrana se reservará el 50% de sus derechos.
Con Dembélé los directivos azulgrana están deshojando la margarita. El francés acaba de lesionarse -nuevamente- y estará de baja por al menos cuatro meses. Las negociaciones por su renovación están muy estancadas porque el jugador ha dado largas al asunto y no ha acatado las llamadas del club. Laporta tiene que decidir si seguirán apostando por él, le darán carta libre para dejar el club el próximo verano (gratis) o le venderán en esta ventana de transferencias.
Por último, está un extraño caso de Sergi Roberto, cuyo papel en el Barça de Ronald Koeman ha dejado mucho que desear. Pasó mucho tiempo lesionado y, cuando estuvo disponible, no rindió como se esperaba. Su continuidad no está asegurada y el Barça intentaría hacer caja con su traspaso.