Marc-André ter Stegen ha sido nombrado como cuarto capitán del FC Barcelona después de que Gerard Piqué tomara la decisión de colgar las botas. Sin embargo, el consenso para designar al alemán como uno de los referentes del plantel no se habría llevado a cabo de la manera habitual para evitar conflictos.
Así lo ha desvelado el diario 'Mundo Deportivo', quien asegura que Xavi Hernández quiso llevar con recelo la elección del nuevo portador de la banda. Si bien el cuerpo técnico tuvo siempre claro que todo debía llevarse a cabo una vez los internacionales estuviesen de regreso en Barcelona, lo cierto es que no se realizó ninguna votación dentro de la plantilla.
El entrenador habría tomado la decisión de forma reservada junto al 'staff' para evitar alterar el orden de jerarquía impuesta desde el comienzo de la temporada, por lo que Ter Stegen ejercerá como cuatro capitán por su condición de veteranía, ubicándose por detrás de Sergio Busquets, Sergi Roberto y Jordi Alba.
Escrutinio innecesario
Según el rotativo, Xavi veía totalmente innecesario someter una votación a estas alturas del curso que pudiera traer consecuencias para la convivencia del vestuario. El objetivo era darle prioridad a la trayectoria del alemán pero no bajo la elección de todo el equipo, ya que podría haber un clima de tensión si alguno de los actuales capitanes se hubiera visto desbancado.
Eso si, a partir de la 2023/24 se retomará el proceso de elección con normalidad, siendo sometida a votación por el resto de los integrantes del primer equipo. De hecho, la salida de Busquets se mantiene aún sobre la mesa, lo que liberaría otro 'spot' dentro de la línea temporal de los capitanes. Habrá que ver qué tanto cambia la situación durante el verano.