Xavi Hernández se marchará del FC Barcelona este domingo después de dos años y medio al frente del conjunto azulgrana. Para el cuerpo técnico liderado por el egarense, el ciclo ha dejado un balance positivo más allá de lo estadístico y de un final inesperado. En total, el de Terrassa habrá dirigido 143 partidos en todas las competiciones, con dos títulos conseguidos en 2023 que rompieron una sequía de cuatro años sin ganar LaLiga.
"Dejamos una Liga y una Supercopa ganando al Real Madrid", destacaron miembros del staff de Xavi en una charla con el diario 'AS'. Ciertamente, el dominio culé en la Liga pasada, con diez puntos de ventaja sobre los 'merengues' y el alirón sentenciado en la jornada 34 evidenciaron la contundencia de un equipo que fue capaz de ganar tres Clásicos seguidos en 2023, incluyendo la exhibición en Arabia en la Supercopa española.
El trabajo con los canteranos, el legado de Xavi y su staff
Del mismo modo, el cuerpo técnico valora el trabajo realizado con los canteranos. "Dejamos una base que, bien cuidada, dará muchos frutos", menciona 'AS' en el balance del staff. Desde su llegada, el técnico egarense dio plena confianza a jugadores como Ronald Araújo, Pedri y Gavi, quienes ya venían ganando protagonismo desde el ciclo de Ronald Koeman. En su segunda temporada, el entrenador no dudó en apostar por Alejandro Balde para resolver el lío del costado izquierdo,
El trabajo de la mano con la cantera y el filial terminó de dar sus frutos en la 2023/24, con la irrupción de Lamine Yamal y Pau Cubarsí, además de la inesperada gran adaptación de Fermín López y el ascenso de otros talentos como Héctor Fort y Marc Guiu que dan una buena base al Barça de cara al futuro para volver a triunfar con un once con mayoría 'made in La Masia'.
El cuerpo técnico también valora la reacción del equipo en 2022
Por otra parte, el cuerpo técnico no olvida el contexto en el que Xavi inició su andar en 2021. "Esto es fútbol y nos quedamos que llegamos a un equipo hundido, sin alma y base", arguyen los colaboradores del egarense. El Barça acabó firmando el subcampeonato después de remontar desde el noveno puesto a finales de noviembre. Aunque la 21/22 cerró sin títulos, quedó el buen recuerdo del 0-4 al Madrid en el Bernabéu y la base del equipo capaz de ganar dos trofeos el año siguiente.
La 23/24 finaliza, nuevamente, con la plantilla muy tocada anímicamente tras los fracasos en Liga y Champions, pero con la certeza de contar con lo necesario para volver a competir en la élite la próxima temporada, a la espera de un par de refuerzos que cubran las debilidades del equipo en la gestación de fútbol y la contundencia. El final de Xavi y su staff fue amargo, pero el balance, en tiempos de crisis, habrá de evidenciar los resultados del trabajo realizado a mediano y largo plazo.