Las rebajas salariales de los jugadores seguirán dando de qué hablar porque tomarán muchísimo tiempo, o eso es lo que ha dejado entrever Joan Laporta este lunes en una rueda de prensa en la que ha hablado sobre los números rojos del FC Barcelona, económicamente hablando. El club trabaja para llegar a un acuerdo con los jugadores, pero la situación es extrema y "no le gusta a nadie". 

El máximo mandatario azulgrana ha desvelado que la masa salarial supone un 103% de los ingresos previstos del club. Un total de 617 millones, un 25 o 30% superior de lo que supone para los competidores directos del Barça. El Real Madrid, por ejemplo, destina 342 'kilos' en el pago de su nómina de jugadores. Una comparación 'odiosa' que desvela la profundidad de la crisis que está viviendo la entidad azulgrana. 

Lo cierto es que el club está trabajando para reducir ese monto, pero no es tan fácil como parece. Gerard Piqué ya ha accedido a una significativa rebaja de su salario, que permitió concretar la inscripción de tres jugadores: Memphis Depay, Rey Manaj y Eric García (además de las ventas/cesiones de jugadores).

"Piqué es un jugador de club, que ama el Barça y ha visto que estamos en una situación comprometida".

Sin embargo, aún hacen falta más esfuerzos. Del central, ha dicho que "es un jugador de club, que ama el Barça y ha visto que estamos en una situación comprometida. Ha hecho algo loable que no haría todo el mundo. Ha permitido que se puedan inscribir a Eric y Memphis. Como el Kun aún no está resuelto esperamos que alguno de los capitanes ayude".

De las negociaciones en este momento, resaltó que se está conversando con Jordi Alba, Sergio Busquets y Sergi Roberto: "Con el agente de Alba se contacto en mayo y a principio de junio se le envió una carta al propio Alba. Vienen de una rebaja y se les pide otra. Hace falta tiempo para que lo asimilen. Ellos mismos han llegado a la conclusión de que la situación es dramática. Tanto Jordi Alba, como Sergi Busquets como Sergi Roberto se están portando muy bien. Harán un acto de servicio al club y cuando podamos se lo recompensaremos".

"Con el resto de los jugadores se está negociando un aplazamiento, una supresión de bonos por titulos"

Lo cierto es que, según se ha entendido de las declaraciones de Laporta, el resto de los jugadores no se someterá a una reducción salarial, sino a un aplazamiento de los pagos. "Los jugadores tienen un salario fijo y por bonus y lo estamos racionalizando. Hay un caso como el de Piqué en el que lo más claro era una reducción directa para poder inscribir a los fichajes. Con el resto se está negociando un aplazamiento, una supresión de bonos por titulos y hay mucha predisposición", ha comenzado diciendo.

Ha sido una verdadera sorpresa para los jugadores, porque el año pasado ya vivieron la misma situación. "Al principio les ha sorprendido y la idea es ir restructurando a toda la plantilla. Recuerdo que ya hubo un reducción por Covid en la 2019-2020 que supuso 39 millones. Ahora se les pide otra rebaja y eso no gusta a nadie, les ha cogido por sorpresa, pero la situación les ha llevado a comprenderlo. Estamos intentando resolver primero los capitanes y luego lo trasladaremos a toda la plantilla", destacó. 

El lío con el límite salarial

Laporta ha comentado que "el límite salarial se presenta en base a un presupuesto. Con los cálculos iniciales de pérdidas LaLiga nos permitía inscribir por 88 millones. Cuando hemos tenido las pérdidas, estos 481 millones de pérdidas, todavía tenemos menos margen", allí era cuando entraba en juego la normativa del '1 a 4', con la que "te permiten fichar si el salario que liberas es de 100 e inscribes 25, por ejemplo".

En el caso de Gerard Piqué, con una presencia regular en la alineación, el ratio es de 1 a 2, "hay más margen, y nos ha dado para poder inscribir, además de los jugadores que se han vendido (Trincao, Todibo, Junior, Aleña, Konrad...)". De la rebaja salarial de cara a la temporada 2021-2022, ha explicado que "no se ha cumplido ninguna de las hipótesis de la anterior junta. Rascando mucho nos encontaremos con 660 millones de ingresos, unos gastos de 1.136 millones y una deuda de 1350 millones".