Este martes, Quique Setién aseguró en unas declaraciones concedidas a 'El Larguero' de la Cadena Ser que el FC Barcelona todavía no le ha pagado la totalidad de su finiquito, motivo por el que el entrenador ya denunció al club azulgrana hace apenas unos meses. Con un juicio pendiente, en la entidad catalana parecen tener claros los argumentos que presentarán para no pagarle lo que le deben a su ex entrenador.
Tal y como explicó el periodista Jordi Martí en SER Catalunya, el FC Barcelona tiene la intención de discutir la "capacidad" y la "actitud" de Quique Setién para dirigir al primer equipo culé en el juicio que tienen previstas ambas partes. Unos argumentos que son, por un lado intangibles pero, por el otro, totalmente comprobables a través de los resultados del técnico cántabro en el Camp Nou.
Quique Setién se puso al mando del FC Barcelona cuando el equipo azulgrana era líder de LaLiga Santander, pero las últimas jornadas fueron catastróficas y finalmente perdió el título liguero. Además, fue artífice de la derrota más humillante de la historia de la Champions League, con un sonrojante 2-8 contra el Bayern de Múnich. En la Copa del Rey, las cosas no fueron mejor y el equipo cayó en cuartos de final ante el Athletic Club de Bilbao.
Hay que decir que la situación en la que se encuentran los ayudantes de Quique Setién es completamente distinta, ya que ellos sí consiguieron solucionar sus respectivos contratos con el FC Barcelona. Eder Sarabia (fichado recientemente por el Andorra de Gerard Piqué), Fran Soto y Jon Pascua anunciaron que ya no tienen situaciones pendientes con el club azulgrana.
Una aventura de medio año y un conflicto posterior
El pasado mes de enero, el FC Barcelona decidió cesar a Ernesto Valverde después de que el equipo cayera en las semifinales de la Supercopa de España. Fue entonces cuando el club azulgrana anunció a Quique Setién como su sustituto durante las dos siguientes temporadas. Lamentablemente, con el cántabro en el banquillo, la situación fue a peor y el equipo no ganó ningún título, despidiendo la temporada con el mencionado 2-8 en Champions League.
Pero antes de esa legendaria goleada del Bayern de Múnich, el FC Barcelona ya había decidido que prescindiría de Quique Setién para iniciar una nueva etapa con Ronald Koeman en el banquillo. Sorprendentemente, pese a que el holandés fue presentado, el club no rescindió el contrato del entrenador cántabro ni de su cuerpo técnico, por lo que ambas partes entraron en un conflicto.