Ronald Koeman no se ha mordido la lengua en una entrevista concedida a 'Algemeen Dagblad', medio neerlandés, y se ha quejado de las filtraciones relacionadas a las 'condiciones' que aparentemente tiene que cumplir para renovar su contrato con el FC Barcelona. El entrenador apuntó que salieron cosas "que me molestaron porque no demostraban apoyo al entrenador".
Cabe recordar que a comienzos de este mes, se había desvelado que en las oficinas del Camp Nou confiaban en extender la estadía de Koeman hasta 2023, pero para ello primero tenía que cumplir con tres condiciones: ganar títulos, recuperar a los 'descartes' (Riqui Puig, Philippe Coutinho, Samuel Umtiti...) y que los jóvenes de La Masia ganaran protagonismo en esta temporada.
"Hubo dos momentos en los que salieron cosas que no indicaban apoyo para el entrenador"
Ahora, el del Zaandam ha dado su versión de la historia y se ha quejado profundamente de las filtraciones. Ha comenzado diciendo a 'AD' que su relación con Joan Laporta es buena y que "el lunes pasado dijo en un programa de televisión que hay confianza en mí. Eso ha sido bueno. Antes de eso, hubo dos momentos en los que salieron cosas que no indicaban apoyo para el entrenador. Eso me molestó".
Con respecto a su futuro, apuntó que "hace dos semanas y media tuvimos una conversación sobre un nuevo contrato. No se filtró nada a los medios. Hasta que el presidente tuvo una sesión con periodistas el pasado martes sobre la situación del club, también el aspecto financiero y tal. Al final, de repente empezó a hablar sobre el contrato".
"Necesito poder controlar cómo jugamos y a quién alineo"
Allí fue cuando comenzó el 'desastre', puesto que "un día después, los periódicos dijeron: 'Koeman puede obtener un nuevo contrato bajo tres condiciones'. Entonces dije: 'Esto no es posible'. Necesito poder controlar cómo jugamos y a quién alineo". Sin embargo, ahora está todo en buenos términos: "Luego, el presidente vino el lunes con esa entrevista televisiva. Y eso ha sido bueno".
No todo es tan sencillo...
El neerlandés, antes de hablar directamente de las filtraciones de su renovación o las condiciones, se refirió a lo complicado que es para todo su entorno los momentos de crisis. "Para contribuir a algo, tienes que demostrar algo, creo. No vale ser plano o simplemente positivo. La presión y la responsabilidad; la gente puede ver que son muy diferentes para un entrenador a diferencia de los jugadores. Al menos así es como lo experimento", destacó.
Asimismo, añadió que "la gente siempre piensa: ganan mucho y solo hacen lo que les gusta. Bueno, tengo una vida bonita y buena, claramente. Pero también hay otro lado. También hay muchas ocasiones en las que apesta. También te dan golpes y, en el fútbol, alguna que otra vez te acuchillan por la espalda. Y eso es lo que pueden ver los espectadores".