El París Saint-Germain ha seguido muy de cerca la situación de Paul Pogba, quien termina contrato en 2022 con el Manchester United. En medio de las especulaciones que le sitúan cerca del club francés, se han desplegado varias pancartas contra el jugador frente al Parque de los Príncipes y la Ciudad Deportiva.
Con mensajes de "Pogba, debes escuchar a tu madre. Ella no te quiere aquí, nosotros tampoco", los aficionados del cuadro parisino se han hecho sentir, en esta ocasión en claro rechazo al jugador del Manchester United. Sin embargo, la razón que motivó a la reacción de los hinchas ha sido un guiño de Paul en el pasado a su máximo rival histórico.
Tiempo atrás, el mediocampista del club inglés no ha ocultado su simpatía por el Olympique de Marsella, club rival del PSG. Su familia y amigos cercanos siempre le animaban a ver los encuentros de esta histórica institución (la única con una Champions League en sus vitrinas en Francia). Así lo hizo saber expresamente durante una entrevista.
"¿El OM? Me gusta, mi padre era fan. Un amigo me obligaba a ver todos los partidos del Marsella. Siempre ha sido un equipo que he seguido", aseveró Pogba tres años atrás en una entrevista concedida a 'SFR Sport'. Fueron estas declaraciones las que motivaron el contundente rechazo de los ‘ultras’ parisinos al que podría ser su futuro jugador.
Interés del PSG
Leonardo, director deportivo del PSG, ha mostrado interés desde hace tiempo en Pogba por su gran calidad técnica y despliegue físico. El mediocampista está en la órbita del club galo, especialmente ahora tras rechazar la renovación con el Manchester United, según publicó 'The Mirror'. El futbolista francés llegó al cuadro inglés en 2016 procedente de la Juventus. Costó entonces 105 millones de euros, convirtiéndose en uno de los fichajes más caros de la historia en ese momento.
'Ultras París', sin responsabilidad
El colectivo 'Ultras París', grupo que suele ser el creador de varias pancartas de este tipo cada año, ha asegurado que no participó en esta acción, según ha informado recoge 'Le Parisien'. Por tanto, sería un acto aislado que no tendría un amplio apoyo en la masa social del club.