Tras su flamante victoria contra la Juventus, el Barça tiene motivos para seguir los partidos de Champions de este miércoles, y es que hay varios puntos que centran la atención de los azulgrana. Dejando de lado el estreno de un Real Madrid tocado, los catalanes están muy pendientes de un Liverpool-Sevilla que puede ser decisivo.
En Anfield continúan las dudas alrededor de la figura de Philippe Coutinho, que quiso marcharse al Camp Nou en verano y podría seguir decidido a forzar una salida del conjunto 'red'. El hecho de seguir apartado a pesar de tener el alta competitiva ha hecho sospechar a los aficionados, que temen un plante del futbolista en la Champions para mejorar sus opciones de fuga.
Sin embargo, la intención de su entrenador es toda la contraria. Ya avisó Jürgen Klopp que el descarte frente al Manchester City se debía a la falta de rodaje del centrocampista con su club, y aunque de nuevo ha vuelto a jugar al despiste, parece que tiene la voluntad clara de hacerle debutar en la temporada con el conjunto inglés.
"Seguro que la afición del Liverpool puede esperar 24 horas más para saber si jugará Coutinho", avisó en rueda de prensa, pero habrá que ver cuál es la decisión del germano, que, de momento, le ha hecho esperar en el banquillo.
Importante, pero no decisivo
El hecho de que Philippe Coutinho participe en Champions con el Liverpool significaría que ya no podría hacerlo con otro equipo en lo que resta de temporada, así que en el caso de un hipotético traspaso al Barça, Ernesto Valverde no podría contar con el en la competición Europea.
Esto sería un bache en su llegada al Camp Nou en invierno, pero no sería un motivo definitivo para los técnicos, que consideran que el brasileño sería la guinda del pastel en una plantilla que por el momento está funcionando bien pero que podría quedarse corta con el paso de los partidos. Toca esperar.