Todavía resta mucho por definir en el último sprint del mercado de verano. La bomba Lionel Messi al Paris Saint-Germain parece no ser la última, pues su compañero de viaje en la última década, Cristiano Ronaldo, aún no tiene claro si su equipo actual, la Juventus, será su ubicación definitiva durante la temporada que se inicia en Italia la próxima semana.
Los dirigentes del club italiano dudan, Cristiano también duda y el mercado veraniego está a la espera del que puede ser el penúltimo gran movimiento del periodo de fichajes del 2021. La Juventus no escapa a la crisis económica que están viviendo otros muchos europeos y que se ha visto reflejada en la salida de Messi del FC Barcelona.
No ha terminado el mercado, y desde el seno del club italiano buscan soluciones que, hasta ahora, no terminan de encontrar. La nueva dirección deportiva ha comprobado la existencia de contratos muy complicados de asumir, especialmente ante la insistencia de Allegri de reforzar el equipo, con el fichaje de Locatelli y el regreso de Pjanic.
El acercamiento de Cristiano al Madrid
Paolo Morganti, director de operaciones y recién llegado al puesto, se ha encontrado un panorama complicado. El deseo del técnico de reforzar el equipo y el de airear el vestuario choca con la realidad. Cristiano no está exento a la actualidad de que la Juve no atraviesa por su mejor momento. Meses atrás ya intentó un acercamiento para su posible regreso al Real Madrid, pero desde el club blanco no dieron opción a realizar movimiento alguno.
Messi, cerró la puerta del PSG
La segunda opción que estuvo activa fue la posibilidad del PSG, club que estuvo muy atento a los movimientos de Messi y ‘Cr7’ durante los últimos meses. Sin embargo, la llegada del astro argentino a París ha cerrado la puerta del Parque de los Príncipes. Al margen, el delantero no ha recibido propuesta alguna que haya considerado interesante.
Último año de contrato en la Juve
Desde Turín creen que la salida del astro portugués podría suponer un cambio de escenario positivo para el club. Valoran la presencia del delantero, pero su desvinculación liberaría una importante cantidad de dinero para acometer esa reforma o cambios que pide Allegri en su regreso a la Juventus.
Juventus y Cristiano desean pactar la salida del jugador, pero el problema más importante es la ausencia de propuestas. El mercado apenas está ofreciendo movimientos importantes y los clubes parecen estar dispuestos a esperar a última hora. Restan dos semanas para hallar un desenlace de una historia que se inició en el verano de 2018 y que puede terminar antes de tiempo.