Kylian Mbappé no se encuentra en su mejor momento. Hasta la fecha lleva 19 partidos, 14 goles y siete asistencias, pero el francés no está siendo tan determinante como en temporadas pasadas. En Francia investigan cuál puede ser el motivo de su pequeño bajón.
Según afirma el Dr. Jean-Bernard Fabre en declaraciones dadas a Le Parisien, este bajón se podría deber a que recientemente se contagió de coronavirus. "Deberíamos pensar en que tuvo la Covid-19. En nuestros estudios intentamos averiguar si no podría aparecer fatiga incluso en gente que ha tenido síntomas y alterar el sistema nervioso con un alto nivel de esfuerzo. Quizás sea parte de las pequeñas secuelas de la enfermedad. Además, muchos jugadores que lo han tenido son una sombra de sí mismos y no solo pasa en Francia", asegura el médico.
"Quizá sea parte de las pequeñas secuelas de la enfermedad. Muchos jugadores que lo han tenido son una sombra de sí mismos"
El doctor considera que otra de las causas puede ser que esté entrenando en exceso, por lo que para solucionarlo pide entendimiento de la situación del jugador. "¿Es sobreentrenamiento o está vinculado al coronavirus? ¿Quizá son ambos?", reflexiona. En lo que va de temporada, Mbappé tiene un 56% de los minutos jugados en la liga francesa. Esta cifra se eleva hasta el 83% en la Champions League. Solo el coronavirus y una lesión muscular le hicieron perderse encuentros esta campaña.
Las secuelas del coronavirus
En una entrevista dada a AS, el actual jefe de los servicios médicos del Elche, César Quezada, explicó cuáles son las secuelas que dicha enfermedad puede dejarle a una persona. "Es una preocupación que tenemos todos. La mayor posibilidad de padecer riesgos trombóticos. Por supuesto, si existe una infección en el pulmón importante, la persona que lo haya sufrido tienen unas secuelas de la capacidad pulmonar. Otros pequeños daños como la falta de olfato o gusto pueden influir en cómo se alimenten", detalló.
Para solucionarlo, han propuesto llevar un plan personalizado para Mbappé midiendo sus esfuerzos y participación en el juego, pero también cada factor como el descanso y la alimentación. El objetivo principal es que llegue en plena forma para enfrentarse al Barcelona en la Champions League "Deberían planear una estrategia junto a él y escuchándole. El error sería imponerle un ritmo concreto a un niño que ya está quemado", añadió el doctor.
Quezada llamó a todos a ser cuidadosos con la enfermedad, y en caso de que algún jugador se contagie, su regreso al campo, tanto a las prácticas como a los partidos, no debe ser de manera brusca. “Todos tienen que tener el máximo cuidado. El problema a nivel de rendimiento en el Covid, tanto por contacto como por padecerlo, son los días de baja, las circunstancias alrededor de él, el estar confinado, que se reduce la capacidad física de manera brusca... Luego la vuelta tampoco tiene que hacerse de forma brusca”.