Luego de ese memorable partido, que marcó un hito en la historia del fútbol mundial por el icónico golazo que anotó Diego Armando Maradona a Inglaterra en el Mundial de México 1986, Steve Hodge decidió cambiar camisetas con el mítico '10’: “La cambié al final del partido y me han criticado mucho por eso. Y otros compañeros de selección se enojaron conmigo”.
En declaraciones con la BBC, Hodge resaltó: “Ese partido nunca será olvidado en la historia del fútbol. Nunca lo culpé por su gol con la mano. Maradona fue un jugador extraordinario. Era tan valiente como un león. Solía ser pateado en todas partes donde jugaba”.
“Esta camiseta la he tenido durante 34 años y nunca intenté venderla. Tiene un valor sentimental increíble"
Para finalizar, el ex futbolista confesó que nunca intentó vender la casaca: “Esta camiseta la he tenido durante 34 años y nunca intenté venderla. Tiene un valor sentimental increíble. Ha sido incómodo y desagradable. He visto artículos en internet diciendo que quiero uno o dos millones y eso es mentira. Encuentro eso algo irrespetuoso y totalmente incorrecto. No está a la venta, lo aclaro”.
Después del fallecimiento de Diego, Hodge recibió múltiples llamados con ofertas astronómicas para intentar hacerse con la reliquia, pero los intentos fueron en vano. Según los especialistas, la camiseta del 'Pelusa' rondaría el millón de dólares.
Para muchos el costo parecería irrisorio, dado que el golazo que se mandó Diego Maradona en aquél partido ha sido uno de los mejores que ha visto el deporte desde su existencia, especialmente por los elementos involucrados: la época, el rival, la garra, la destreza de Diego con la redonda, los jugadores que lo enfrentaron y quedaron regados en el paso del '10’, y el escenario de unos cuartos de final de la Copa Mundial.
La partida de una leyenda
Pese a su desaparición física, para muchos Maradona es considerado como el mejor futbolista en la historia, lo que lo convierte en un icono inolvidable. Una leyenda que encontró en la alfombra verde su casa, y que en ella deleitó a cada espectador con su juego y personalidad. A poco más de un mes de su muerte, Maradona seguirá vivo en los recuerdos de sus seguidores y en los libros de historia del fútbol mundial.