Hansi Flick, técnico del Bayern Múnich y hacedor del mítico sextete, anunció este sábado que tiene como propósito marcharse del banquillo del conjunto bávaro a final de la presente temporada. El estratega hizo este anuncio en declaraciones a la televisión regional NDR y a Sky tras el partido de la Bundesliga frente al Wolfsburg, que el campeón defensor ganó (3-2).
"Le he comunicado al club que quiero dejar el puesto a final de la temporada", afirmó el técnico, de 56 años, cuyo contrato con el Bayern expira a final de junio de 2023. “Tengo que digerir todo esto, las últimas semanas no han sido fáciles. Es muy importante que el equipo se entere de esto por mí”, aseguró el estratega.
El futuro de Flick al frente del banquillo bávaro estaba en el aire después de quedar fuera de la Champions League tras el partido disputado esta semana frente al Paris Saint-Germain, su rival en la final de la pasada edición de la que quedaron campeones. Sus desavenencias con los altos directivos del club (en concreto con Salihamidzic, director deportivo) debido a la política de renovaciones y de fichajes puede haber sido uno de los detonantes de su adiós.
A ello se le suma que Flick es considerado como uno de los candidatos a suceder al seleccionador alemán, Joachim Löw, quien dejará el cargo tras la próxima Eurocopa. “El futuro no está del todo claro. Por supuesto que la oferta de la Selección es una propuesta que todo técnico tiene que plantearse”, concluyó el entrenador alemán.
Una época dorada
Para nadie es un secreto la magnificencia del Bayern Múnich. Es uno de los clubes más grandes del viejo continente y eso fue ratificado gracias a la llegada de Hansi Flick. Desde su llegada, tras unas deprimentes temporadas por su participación en Champions y especialmente después del paso de Niko Kovač en el banquillo, el Bayern comenzó un extraordinario repunte que lo condujo a la conquista del mítico sextete, el segundo en la historia del fútbol mundial.
El Bayern de Flick consiguió lo inimaginable con un equipo glorioso, poderoso. El Bayern goleó a quien se le atreviera a encararlo, excepto al PSG en aquella final de Champions, en la que una vez más venció el club bávaro, pero solo 1-0. Fueron los galos sus verdugos en esta edición, el fútbol demostrando que da revancha sin importar cuán grande seas o lo mucho que se intente.
Así pues, eliminado de Champions en cuartos, llegó el fin de la era Flick. Que no duró muchos años, pero que las cosechas quedarán grabadas en la memoria de la afición y estampadas en los libros del fútbol mundial. Flick se marchará sin el premio a Mejor Técnico, al que fue nominado, pero con el reconocimiento por haber llevado a cabo una labor extraordinaria, catapultando al Bayern nuevamente a la cúspide europea.