El duelo de la Copa de Rusia entre el Zenit de San Petersburgo y el Spartak de Moscú estuvo marcado este domingo por la espectacular pelea que se vivió en el tiempo del descuento. Los jugadores de ambos equipos se enzarzaron en una multitudinaria lucha en la que no faltaron todo tipo de patadas y puñetazos, y a la que también se acabaron sumando hasta los suplentes para completar una escena casi de película

El partido iba 0-0 en el descuento tras haberse cumplido los 90 minutos y parecía que ambos asumían que el partido se iba a decidir por penaltis. Tras un tiro libre de los visitantes, Wilmar Barrios, jugador del Zenit y Promes, jugador del Spartak, chocaron hombros y empezaron a cruzarse alguna que otra palabra amenazante. Sin embargo, lo que parecía una discusión caldeada se convirtió en una batalla campal entre ambos equipos. 

La pelea inició y se sumaron jugadores y miembros del cuerpo técnico para protagonizar una de las imágenes más vergonzosas del fútbol ruso en el último tiempo. El colegiado, impactado por como se le había ido de las manos el partido, acabó expulsando seis jugadores. Hubo un momento en el que Barrios se vio rodeado y golpeado por 5 jugadores del Spartak, aunque logró recibió ayuda para no resultar tan golpeado.

Las seis rojas

Después de casi un minuto de descontrol absoluto, los ánimos se calmaron y llegó el momento de las tarjetas rojas. El árbitro se vio obligado a expulsar a un total de seis jugadores y uno de ellos fue el ex del FC Barcelona, Malcom. El extremo brasileño se marchó a los vestuarios junto a sus compañeros Rodrigao Prado y Barrios, mientras que Aleksandr Sobolev, Aleksandr Selikhov y Shamar Nicholson fueron los que recibieron la roja por parte del Spartak. El duelo se resolvió en la tanda de penaltis, donde el Zenit terminó ganando por 4-2.