Ralf Rangnick es el nombre del ganador de la carrera para el banquillo del Manchester United. Ernesto Valverde, Mauricio Pochettino, Zinedine Zidane y Paulo Fonseca fueron algunos de los competidores que aparecieron con fuerza tras la destitución de Solskjaer, que llegó como interino y jamás terminó de darle el impulso necesario al club.
El alemán estaría en proceso a desvincularse del Lokomotiv de Moscú, equipo en el que cumple la labor de director deportivo. Su llegada a Old Trafford será para dirigir al equipo hasta el final de la campaña y luego un contrato de dos años dentro del organigrama del equipo para ayudar al reflote de la entidad.
Con el noruego las cosas tomaron un nuevo rumbo tras la salida de Mourinho, que no pudo recomponer lo que dejó Van Gaal en el vestuario y pese a una Europa League, las cosas no mejoraron. De hecho, terminó incluso peleado con Paul Pogba, líder y estrella del club tras su fichaje récord procedente de la Juventus.
Zidane y Pochettino no aceptaron
Zinedine Zidane fue el primero en negarse principalmente porque no está enlazado a la Premier. Su experiencia como jugador no le permitió pasar por Inglaterra y no quiere meterse en un fútbol que no entiende a la perfección, ya que no se siente preparado y tampoco le atrae especialmente dirigir en Inglaterra.
Mauricio Pochettino tampoco se sintió seguro con la medida porque eso supondría escapar del PSG, algo que le podría sentenciar de cara a un gran proyecto a futuro por no saber manejar estrellas en un vestuario mediático. El argentino adora la Premier, pero entrar a mitad de temporada no sirvió ni para sembrar la duda.
Ernesto Valverde parece decidido a quedarse en el descanso indefinido pese a tener planes de volver, aunque la experiencia en el Barcelona no fue la mejor en términos de disfrute y paz, palabras que nunca conoció en su periplo culé que terminó por quemarle las ganas, la creatividad y la gasolina, aunque sigue recargando.