El martes, Mathias Pogba volvió a pronunciarse sobre los presuntos escándalos de su hermano menor, Paul. El mayor de los Pogba insiste en afirmar que las acusaciones de extorsión del jugador de la Juventus son falsas y, a su vez, afirma que el centrocampista ha recurrido a la brujería no solo para intentar perjudicar a Kylian Mbappé con lesiones musculares, sino también para librarse él de las dolencias físicas que le afectaron en su paso por el Manchester United.
"La única forma de supervivencia que tengo es exponer sus mentiras y su impostura. Por eso confirmé su brujería, porque lo que importa aquí no es si funciona o no, o si crees en ella o no, sino lo que implica como maldad. Porque estas prácticas requieren que hagas cosas malas para sus rituales con voluntad de dañar", dijo Mathias el martes en un vídeo subido a sus redes sociales.
Al respecto, añadió: "Entonces aprovecho para preguntar, ¿Paul no negó en la base haber recurrido a morabitos? Y para protegerse de lesiones, ¿es necesario pagar millones de euros a este mago durante años? (Especialmente porque no funcionó) Y los investigadores y las autoridades fiscales pueden verificar esto fácilmente con el banco central de Londres", sentenció el mayor de los Pogba.
Mientras tanto, Paul aguarda por la respuesta legal de sus abogados, pero preocupado, del mismo modo, por el impacto que esto pueda tener en su futuro con la selección francesa. "Si una prueba sólida confirmara las acusaciones del hermano y materializara cualquier delito de Pogba hacia Mbappé, no cabe duda de que él y su clan no dejarían pasar por alto el enfrentamiento. A dos meses y medio del Mundial, Deschamps se encontraría entonces ante una situación explosiva que deberá resolver. Y, siempre suponiendo que los hechos fueran ciertos, no serían a priori a favor de Pogba”, comentó 'RMC Sport' el martes.
Asaltos y extorsiones: El trasfondo del escándalo
El mismo medio parisino asegura que el jugador de la Juventus fue asaltado en marzo en París, en medio de una convocatoria con Francia, por una banda de asaltantes a la que pertenece su hermano y varios amigos de la infancia. Presuntamente, dos individuos encapuchados y armados salieron de una de las habitaciones del lugar en donde Paul se reuniría con unos amigos con fusiles de asalto, uno de ellos un M16.
El centrocampista habría accedido a pagar 100.000 euros para ganar tiempo, pero los asaltantes le exigían 13 millones de euros por “servicios prestados”. La Fiscalía de París investiga el caso, ya que la extorsión al jugador habría continuado meses después. Al respecto, Mathias negó su vinculación con estos asaltantes y aseguró que su hermano miente para perjudicarle.
"Todas las palabras de Paul, desde la audiencia a principios de agosto, antes de mis vídeos, hasta la respuesta de sus abogados y las respuestas de sus partidarios. Solo tienen la intención de arrastrar mi nombre por el lodo (...). En fin, solo tengan un poco de paciencia, ¡se viene el destape de las mentiras y mi versión de los hechos!", sentenció en sus declaraciones del martes.