El Real Madrid, AC Milan y Manchester United serían los tres grandes y principales impulsores de la polémica nueva Superliga Europea, a la cual la propia FIFA le ha cerrado este jueves de momento las puertas. La revelación la hizo el prestigioso periódico británico The Times, tras el descubrimiento de un incendiario documento, que no ha hecho otra cosa que colocar más gasolina al fuego.
Como se sabe, el máximo organismo del fútbol mundial y las seis Confederaciones de cada continente (AFC, CAF, CONCACAF, CONMEBOL, OFC y UEFA) han vetado la competición impulsada por los mencionados clubes y amenazó con inhabilitar a los jugadores que tomen parte en ella. En concreto, no podrán participar en competiciones como el Mundial, la Eurocopa, la Champions, entre otros torneos de envergadura. La noticia ha resultado un ladrillazo para todos los conjuntos europeos que tenían aspiraciones de hacerse, con una nada desdeñable suma de dinero, solo por participar.
Según la versión del mencionado medio de comunicación, 310 millones de libras (345 millones de euros) cobraría cada uno de los equipos que formen parte de la Superliga Europea, que de una plantaría cara y pondría en riesgo la continuidad de la UEFA Champions League. También se habla que aparte del United, Milan y el Madrid otros conjuntos ingleses están dispuestos a formar parte de la nueva competición.
Sin embargo, el sueño de Florentino Pérez, de momento, parece que quedará en una gaveta. Esto, porque la FIFA y las confederaciones recalcaron que "todas las competiciones deben ser organizadas o reconocidas por el organismo competente a su nivel correspondiente; es decir, por la FIFA a nivel mundial y por las confederaciones a nivel continental".
"En este sentido, las confederaciones reconocen a la Copa Mundial de Clubes de la FIFA, con su formato actual y nuevo, como la única competición mundial de clubes, mientras que la FIFA reconoce a las competiciones de clubes organizadas por las confederaciones como las únicas competiciones continentales de clubes", remarcan.
Pero el hecho de que sea el Real Madrid, el Milan y el Manchester United los impulsores de la idea, hace pensar que apenas se trata del primer intento. El presidente de los blancos nunca ha ocultado su interés por la Superliga. Cuando ha hablado sobre el tema, se ha referido a que «se necesitan nuevas fórmulas que lo hagan más competitivo, más emocionante y más fuerte», en alusión a la Champions. Eso fue lo que explicó en la última asamblea de la entidad blanca, en la cual zanjó: «Una reforma que no puede esperar».
Repasado lo anterior, se entiende ahora un poco la reacción de la FIFA y de las Confederaciones, que en muchísima medida se debe a Florentino Pérez, puesto que varias fuentes cercanas a la UEFA aseguran que el mandamás blanco estaba cocinando el plan a espaldas del propio organismo europeo y ya se habría reunido con varios clubes para seducirles. Pero otras versiones aseguran que hasta hace poco la propuesta había naufragado, debido a la disparidad en los beneficios económicos. Solo los tres equipos mencionados, además del Barcelona, con Josep Maria Bartomeu al frente, apostaban férreamente por el cambio.
Posición de LaLiga
«La FIFA y las confederaciones son conscientes del daño que haría al ecosistema del fútbol actual. Aquí no aparecería más dinero, sino que intentarían concentrarlo en unos poquitos clubes, aunque insisto que sería un fracaso a medio plazo. Aquellos clubes que puedan estar trabajando en este proyecto a espaldas de las instituciones del fútbol no son leales con las competiciones en las que participan, eso es lo que yo no entiendo. Ahora la FIFA ha sacado una nota y habla de rumor, seguro que hay algo más que un rumor», expresó Javier Tebas, presidente de la LaLiga.