TRAS EL 2-2 DEL BOCA-RIVER
River-Boca: Infierno o paraíso en la final de la Copa Libertadores
Publicación:22/11/2018 - 21:40h
Actualización:24/11/2018 - 20:33h
River Plate y Boca Juniors se jugarán la gloria o el infierno, las dos caras de la moneda, en la vuelta de la final de la Copa Libertadores que dará comienzo este sábado a las 17 horas (21 hora española), tras el 2-2 de la ida en La Bombonera
Si un partido es capaz de parar el mundo, además del Clásico entre FC Barcelona y Real Madrid, es sin duda el River Plate-Boca Juniors. Los dos clubes legendarios de Argentina se medirán este sábado en la vuelta de la final de la Copa Libertadores, tras el 2-2 del partido de ida en La Bombonera, y lo harán en un Monumental que estará a rebosar de almas 'millonarias', sin que estén presentes aficionados visitantes en las gradas.
La Bombonera tembló en el vibrante 2-2 de hace unas semanas, y se prevé que lo mismo suceda con el Monumental. "El que pierda cargará una cruz de por vida", presagió en las últimas horas el chileno Marcelo Salas, quien fuera estrella de River Plate en los años 90. Razón no le falta, teniendo en cuenta la tradicional rivalidad entre ambos clubes, igualmente comparable a la de FC Barcelona y Real Madrid.
El 'Superclásico' de este sábado decidirá qué club accede al paraíso y cuál desciende al infierno. River Plate dispone de la posibilidad de rematar la final a doble partido en casa, tras el 2-2 de la ida, y su entrenador, Marcelo Gallardo, no podrá alinear a Rafael Santos Borré por acumulación de tarjetas amarillas. El técnico no podrá estar presente en el banquillo al estar suspendido por la federación regional, pero deberá tomar una decisión sobre el acompañante de Pity Martinez y Lucas Pratto en la delantera.
Barros Schelotto, el técnico de los 'xeneizes', tiene también alguna que otra duda encima de la mesa. ¿Alineará a Cristian Pavón, lesionado durante el primer encuentro? Otra opción sería la de alinear a dos delanteros puros como son Darío Benedetto y Wanchope Ábila, aunque más allá de quién juegue, se prevé que se repita el guión de la ida.
River Plate cuidando el balón e intentando abrir espacios en la defensa de Boca Juniors, y los 'xeneizes' esperando oportunidades para salir rápido al contragolpe y coger a los 'millonarios' desprovistos en defensa. Un plan de juego que podría cambiar por la tensión y las emociones del momento, pero que sobre el papel no se distanciará mucho de lo vivido en el partido de ida.
El Barça seguirá a algunas jóvenes promesas
Durante el partido, el FC Barcelona volverá a tener la oportunidad de seguir de cerca, si es que tienen minutos, la actuación de algunos jugadores que interesan en el seno del club azulgrana de cara al mercado de fichajes. Por parte de Boca Juniors gustan Balerdi (19 años) y Almendra (18). Por parte de River Plate, Gonzalo Montiel (21) y Exequiel Palacios (20), aunque este último lo tendría ya hecho con el Real Madrid.
Más allá de los nombres propios y de la atención de los grandes clubes de Europa en dicho encuentro, así como de la afición internacional, lo que se espera es que se viva un gran partido de fútbol y, sobre todo, que no haya incidentes extradeportivos. Los aficionados deberán comportarse y animar a los suyos sin meterse con los demás. Todo lo que empañe al fútbol, o a la alegría de vivir una final única, estará mal visto a los ojos del mundo.