El centrocampista turco del FC Barcelona, Arda Turan, vivirá una eliminatoria llena de emoción contenida contra el Atlético de Madrid, su ex equipo y el rival al que intentará batir con el conjunto azulgrana en la ronda de cuartos de final de la UEFA Champions League 2015-16. Desde que era niño, Arda Turan había visto por televisión los partidos de la Champions League y había soñado con ganar algún día el título, pero de momento se le ha resistido hasta ahora y cree que, con el Barça, tendrá más posibilidades de ganarlo que en ningún otro club.
"Llevo al Atlético en mi corazón", dijo Arda Turan cuando dejó el Atlético de Madrid tras anunciar que fichaba por el FC Barcelona. Antes de enfrentarse por primera vez al Atlético con la camiseta blaugrana a finales del pasado mes de enero, además, aseguró que "tenía este partido en la cabeza hace tiempo, quiero al Atlético". Pues bien, esta vez le tocará jugar por partida doble contra sus ex compañeros, regresando al Vicente Calderón, el que a lo largo de cuatro temporadas fue su estadio y donde protagonizó algunas escenas curiosas, como cuando tiró una bota a un juez de línea.
Esta temporada, Arda Turan ha jugado sus primeros minutos en UEFA Champions League en la eliminatoria contra el Arsenal, pero quiere más y desde que aterrizó en la entidad culé ya dejó claro que uno de los principales objetivos que tenía en el club azulgrana era ganar algún día la UEFA Champions League. De hecho, tiene la espina clavada de la final perdida contra el Real Madrid durante la temporada 2013-14, la misma en la que lograron eliminar al Barça en cuartos de final. "Estuve muy orgulloso aquel día de mis compañeros. Si toca perder prefiero hacerlo así".
En la última eliminatoria de cuartos de final que disputó, la temporada pasada, fue expulsado en la ronda de cuartos de final contra el Real Madrid. Ahora, pese a que es un jugador propenso a recibir tarjetas amarillas, intentará dejarse la piel sobre el terreno de juego y, con cabeza, ayudar al máximo a sus compañeros para garantizar el avance del Barça a unas nuevas semifinales de Champions League. La gloria está cerca, pero todavía quedan varios partidos para seguir luchando por ella. Y el Atlético no es un rival fácil.