Este martes, se han conocido los dos primeros equipos clasificados para los cuartos de final de la Champions League: el Leipzig y el Atalanta. El equipo alemán consiguió golear al Tottenham de José Mourinho (3-0) tras haber vencido también en la ida y los italianos volvieron a derrotar al Valencia (3-4) después de haber dejado la eliminatoria casi sentenciada en el primer duelo.
El Leipzig humilla al Tottenham de Mourinho (3-0)
El actual subcampeón de la Champions League se ha quedado fuera de la competición en la primera eliminatoria que ha disputado. Lo ha hecho, eso sí, frente a un Leipzig que ha vuelto a demostrar que es un equipo preparado para jugar muy bien al fútbol y que está preparado para sorprender a cualquier equipo, por favorito que sea a levantar la 'orejona'.
El Tottenham, como ya sucedió en el partido de ida, echó mucho de menos la presencia de sus dos grandes estrellas ofensivas: Harry Kane y Son. Sin ellos, el potencial ofensivo se redujo y dejó al equipo a merced de los germanos. Sabitzer, primero con un tiro desde la frontal y luego con un cabezazo desde el interior del área, sentenció a los de Mourinho con la colaboración de un Hugo Lloris que se 'zampó' los dos tantos.
El 0-1 de la ida ponía el partido muy cuesta arriba para el Tottenham, que buscó el gol de la esperanza pero que se encontró con un rival superior en todas las facetas. En el tramo final de partido, Forsberg aprovechó una jugada embarullada dentro del área para establecer el 3-0 definitivo y enterrar al equipo londinense.
El Valencia, sin opciones en un Mestalla vacío (3-4)
El 4-1 que el Atalanta le endosó al Valencia en el partido de ida disputado en el Giuseppe Meazza hacía que solamente un milagro pudiese meter al conjunto 'che' en cuartos de final. No obstante, los errores individuales, la falta de público en las gradas de Mestalla a raíz de la prevención por el coronavirus y el acierto de Ilicic -que marcó los cuatro goles de los italianos- hicieron imposible la remontada.
A los tres minutos, el delantero bosnio ya había marcado de penalti, obligando al Valencia a meter cinco tantos. Pese a que los de la capital del Turia mostraron más garra que en el partido de ida, el conjunto italiano volvió a ser superior y a certificar un pase a cuartos de final más que merecido.