El FC Barcelona ha vivido recientemente unas jornadas un poco turbulentas. Si bien, exceptuando el Clásico, el Barça venía con un verdadero paso arrollador en todas las competiciones, Xavi Hernández y su 'staff' han tenido que lidiar con un problema claro y evidente: las lesiones en demarcaciones clave del terreno de juego.

Afortunadamente, de los seis lesionados que quedaban en la enfermería azulgrana, tres ya están en la dinámica, como Robert Lewandowski, Raphinha y Jules Koundé, este último recuperado en tiempo récord, acortando hasta en dos semanas su proceso de recuperación. No obstante, al elenco azulgrana aún le quedan por recuperar tres nombres, dos de ellos vitales en el esquema, como Frenkie de Jong y Pedri González, quienes, junto con un buen revulsivo como Sergi Roberto, esperan poder volver a tener acción pronto.

De Jong y Koundé, jugadores vitales en el circuito de pases del Barça

Un dato relevante que hay que destacar en cuanto a las ausencias es el rendimiento del neerlandés y el francés en LaLiga. A pesar de haber estado lesionados durante algunas jornadas, son los jugadores con la mayor tasa de pases por partido, con 94.3 para el centrocampista y un 72.2% para el zaguero, y también tienen el mayor porcentaje de acierto, con un 94% y un 92% respectivamente.

Esto es importante para dimensionar el impacto de la ausencia de ambas piezas en la escuadra catalana. No solo son jugadores estelares, sino que desempeñan roles específicos en el terreno de juego y en el engranaje del Barça.

Koundé, clave para la salida con balón desde el fondo

Por un lado, el nativo de París, uno de los que más minutos ha acumulado con Xavi hasta ahora en esta temporada, es un muro defensivo y también desempeña un papel crucial en la salida limpia desde la defensa con el balón controlado. Esta tarea, en la actualidad, ha sido asumida por Andreas Christensen, quien también muestra buenos números con un promedio de 67.6 pases por partido y un 95.48% de precisión.

Sin embargo, en los últimos partidos, aunque ha sido sólido en labores defensivas, el danés ha estado un poco más restringido en sus funciones ofensivas. Esto, sumado a la menor participación de Iñigo Martínez y Ronald Araújo en la construcción del juego desde la defensa, hace evidente que la ausencia del francés limita al elenco catalán en un recurso que ha sido vital para el club a lo largo de su historia.

De Jong, necesario para el armado de juego en el mediocampo

Ni hablar en la zona medular, donde la presencia del neerlandés se ha vuelto más imperiosa. Desde su marcha, se puede decir que el mediocampo del Barça ha experimentado una notable transformación. Aunque Ilkay Gündogan no desentona en las labores de pase, con un promedio de 55.18 pases por partido y un 89.4% de precisión, se desaprovecha su capacidad goleadora cuando se encuentra más cerca del área rival.

Además, la ausencia de Frenkie de Jong ha dejado al descubierto las deficiencias de Oriol Romeu, quien ha mostrado un nivel bastante bajo desde que el exjugador del Ajax no está junto a él en la zona medular. Afortunadamente, Gavi y Fermín han tenido un buen desempeño en esa área, pero con ellos se pierde un poco la cohesión entre líneas de pase. De Jong es experto en conectar la defensa y el ataque, desempeñando un papel de 'todocampista' que se extraña en la Ciudad Condal. Su regreso se espera con ansias, ya que su presencia revitalizará el juego del Barça y le devolverá cierto dinamismo perdido.