El FC Barcelona tiene varias perlas en la Masia en estos momentos, pero ninguna brilla tanto como Riqui Puig. El centrocampista lleva destacando ya hace varios años y en esta pretemporada ha demostrado que está para jugar en Primera. Ha sido de los mejores a lo largo de la preparación, pero su futuro no está del todo claro.
La gran ilusión y el principal objetivo del de Matadepera es quedarse en el Barça y jugar en la primera plantilla. El problema es que la competencia esta temporada en el centro del campo es más feroz que nunca y Riqui no tiene sitio. Sergio Busquets, Frenkie de Jong, Ivan Rakitic, Arthur Melo, Arturo Vidal y Carles Aleñá le cortan el paso y el canterano tendrá que esperar su oportunidad.
Hay muchos clubes que han preguntado por él y que estarían encantados si lograran su cesión. El equipo barcelonista se plantea este escenario muy seriamente, pero el jugador no lo termina de ver claro. En todas sus declaraciones ha dejado claro que su idea es quedarse y esperar su oportunidad. Pero eso podría ser perjudicial para su progresión, ya que en Segunda B no puede dar más de sí.
Estos últimos días se está hablando mucho de su salida e incluso Valverde opinó sobre ella. El 'Txingurri' lo dejó todo en manos del futbolista y del club, pero dejó caer que en el medio hay demasiada competencia y que no va a tener sitio este año. "Con Riqui Puig es una cuestión que deben valorar el club y él. No lo sé. Es un jugador con un gran potencial y futuro. Ahora mismo tenemos muchos jugadores en el centro del campo. No sé cuál es el pensamiento del club en general", aseguró.
Riqui podría replantearse su situación
Estas palabras podrían hacer que Riqui reflexione y termine aceptando alguna de las propuestas que tiene. El Zaragoza preguntó por él hace poco y con el fichaje de Kagawa tiene un proyecto interesante para volver a Primera. Pero a pesar de eso, lo ideal para el mediocampista sería jugar en un equipo de LaLiga en el que vaya a tener minutos.
Quedarse en el Barcelona supondría jugar con el filial cada fin de semana en una categoría muy inferior a su calidad y potencial. Entrenaría con el primer equipo cada día, pero para mejorar y crecer necesita partidos oficiales en la élite. La decisión final será suya y del propio Barcelona, pero ahora mismo parece complicado que pueda tener oportunidades de jugar con los mayores habitualmente.