Este miércoles 10 de marzo el FC Barcelona cayó eliminado en los octavos de final de la presente edición de la UEFA Champions League ante el París Saint-Germain (PSG), tras el empate (1-1) en el partido de vuelta celebrado en el Parque de los Príncipes, lo que dejó el global tras la goleada (1-4) de los dirigidos por el argentino Mauricio Pochettino en el Camp Nou en 2-5. El resultado siginifica que Leo Messi se quedó otra vez sin la posibilidad, desde el 2015, de hacerse con la máxima competición europea.
Sin embargo, el astro argentino firmó un buen partido e hizo lo que mucho le demandaban sus críticos: luchar hasta el final. Tanto, que tras el penal cobrado por Kylian Mbappé, solo siete minutos más tarde, en el 37, se mandó un zapatazo para superar al siempre difícil guardameta costarricense Keylor Navas y conservar las esperanzas de una heroica remontada.
De hecho, poco después Messi tuvo la oportunidad de poner a los dirigidos de Ronald Koeman arriba, pero falló un penal cobrado casi al final de la primera parte, que en honor a la verdad, debió terminar con el marcador favorable para los culés, que salieron enchufados y generando las ocasiones más peligrosas del todo el encuentro. Es por ello, que los ánimos de la 'pulga' tras la nueva eliminación no fueron los mismos que dejaron los naufragios ante Roma, Liverpool y Bayern Múnich.
Así lo confirmó el propio entrenador neerlandés tras el compromiso, cuando en la rueda de prensa los periodistas lo interrogaron sobre las sensaciones de Messi, en medio de la todavía incertidumbre que existe sobre su continuidad en la Ciudad Condal y de la posibilidad de que sea esta la última Champions League que juegue luciendo los colores del Barça.
Leo con buenas sensaciones
"En general, Leo ve desde hace bastante que el equipo va a más. Con los cambios que hemos hecho, metiendo a gente joven. Messi no puede tener dudas sobre el futuro de este equipo", expresó Koeman, quien consideró que se ha hecho un lavado de imagen tras la debacle sufrida en el Camp Nou, donde el principal protagonista fue Mbappé con sus tres goles.