No parecía una temporada prometedora hace algunos meses, pero paso a paso el FC Barcelona ha ido consolidando su liderato y vuelve a ser un aspirante sólido a las tres competiciones en juego. Los azulgrana saben que para alcanzar los títulos deben prolongar su esfuerzo hasta el final del curso, y de momento en las próximas semanas deberán afrontar un nuevo pulso del calendario.
Tocará rendir al máximo hasta el parón navideño, y el primero de los desafíos es un Sevilla que llega sin complejos al Camp Nou. Los catalanes cuentan con varias bajas entre sus filas, pero quien ha podido recuperarse a tiempo es Andrés Iniesta, al que los técnicos han esperado durante toda la semana para que finalmente se colara en la convocatoria sobre la bocina.
No completó el entrenamiento del jueves, pero sí ha logrado finalizar la sesión del viernes con buenas sensaciones, o por lo menos las suficientes como para disputarle el puesto a algunos de sus compañeros. Y es que contra un rival tan exigente, la magia del manchego parece demasiado importante como para prescindir de ella.
En este sentido, a Valverde le ha surgido la duda, ¿cómo gestionar su estado físico? No sería la primera vez en el curso que el de Fuentealbilla es titular después de haber estado tocado, pero en otras ocasiones parecía más claro que el centrocampista estaba apto para jugar. Su presencia ha sido muy importante en lo que va de campaña, y podría decidir el duelo del Camp Nou.
¿Y si no juega?
El mismo Iniesta reveló el día de su renovación que sería él quien afrontaría con total honestidad la posibilidad de quedarse fuera en algunos partidos si las piernas no daban más de sí. Así, parece que será el propio futbolista quien tenga mucho a decir sobre quien saltará al césped de inicio, aunque su entrenador está bastante tranquilo.
Si bien es cierto que Ernesto Valverde medita sobre la alineación, también lo es que confía en el resto de sus pupilos. "Tenemos otros jugadores con grandes características que lo pueden hacer bien", ha avisado el Txingurri en rueda de prensa, concentrando las miradas en Denis Suárez, que se postula como sucesor del veterano capitán. Si este no pudiera participar, podría ser el gallego quien lo haga, con Iniesta esperando en el banquillo y el mismo objetivo de siempre: Ganar.