El partido entre el FC Barcelona y el RCD Mallorca dejó varias sensaciones al Camp Nou. La primera de ellas fue el gran paso que dio el club de cara a la clasificación a la siguiente Champions y a la Supercopa de España. Sin embargo, también hubo otro momento clave en partido liguero: el regreso de Ansu Fati. A los 75' minutos del complemento, Pierre-Emerick Aubameyang cedió su lugar para que la 'joya' volviera a 'debutar' tras varios meses lesionado.
Su regreso es una gran noticia para el proyecto deportivo de Xavi Hernández, quien ha dejado claro en rueda de prensa que su reincorporación es vital para el club. "Estoy muy feliz por el regreso de Ansu, es un jugador especial. Tiene gol. En los entrenamientos marca sin querer. Ahora mismo lo veo más de ‘9’ que en la banda. Aún no tiene ritmo, pero es un futbolista diferencial y le hemos echado de menos estos meses", aseguró el egarense.
Con esto sobre la mesa, la vuelta del '10' podría ser bálsamo para el futuro próximo. El técnico confía en que Ansu dará un paso adelante como líder del equipo en el siguiente curso, y si le respetan las lesiones, sus atributos y características le permitirían ocupar la posición de delantero centro en caso de que la dirección deportiva no pueda fichar a un 'killer' como Robert Lewandowski.
El Barça todavía no ha renunciado a la posibilidad de contratar al polaco, pero parece que el Bayern Múnich no pondrá facilidades y la directiva deberá buscar soluciones si no quiere quedarse a la deriva con su frente de ataque. A pesar de ello, Xavi está tranquilo, pues tiene presente que si los problemas musculares no reaparecen, el de Guinea-Bisáu rendirá a la perfección como referente en el área rival.
Múltiples beneficios
Esta no sería la primera vez que jugaría en esta posición, pues durante su etapa formativa en las inferiores de la institución, también se desenvolvió como '9'. Además, a sus 19 años, tiene un cartel atractivo para los patrocinadores, lo que transmite tranquilidad a nivel social y económico al Barcelona. La ovación culé al verle pisar el césped del Camp Nou no hace más que confirmar que el barcelonismo confía en él, lo que evidencia que su regreso significa 'algo más' para el aficionado.