El Barça presiona a Pjanic: O acepta salir con rebaja o habrá represalias

Miralem Pjanic es uno de los futbolistas del FC Barcelona​​​ que tiene más papeletas para marcharse este verano. El bosnio no entra en los planes de Ronald Koeman y el club tampoco quiere contar con él debido a su alto salario. Por su parte, el propio futbolista se ha hartado de 'chupar' banquillo y la próxima campaña quiere jugar, algo que no pasará si se queda en el Camp Nou, aunque no se marchará a cualquier precio.

El Barça todavía tiene que amortizar unos 45 millones de euros de su fichaje, por lo que no puede venderlo por menos de esa cantidad para no computar pérdidas. Teniendo en cuenta que su valor de mercado actual es de 20 millones y que jugó poco el curso pasado, es casi imposible que algún equipo quiera pagar tal cantidad de dinero por su traspaso. Venderle, por lo tanto, no es algo viable en estos momentos.

Con el traspaso casi descartado y después de que el mediocentro descartara recibir la carta de libertad que se le ofreció, la cesión es la única opción de que el de Tuzla salga. El problema es que Miralem no está dispuesto a rebajarse un solo euro de su ficha para salir y los clubes que le pretenden, Inter de Milán, Roma y Juventus de Turín, no están dispuestos a pagar su salario íntegro, que asciende a unos 6 millones netos.

Por este motivo, según apuntan desde el diario 'Sport', en el Barcelona están hartos de esta situación y están presionando a Pjanic para que acepte una rebaja y así pueda salir. Según parece, la entidad incluso estaría dispuesta a tomar medidas más drásticas si el balcánico sigue negándose. El centrocampista se quiere ir y su único deseo es regresar a Italia y más concretamente a la Juve, pero su condición es no perder dinero y eso es algo que ahora no se cumple.

El Barça espera que el jugador cambie de opinión para poder solucionar su marcha la semana que viene. Los catalanes necesitan rebajar cuanto antes masa salarial para poder cumplir con el límite impuesto por LaLiga y la 'operación salida' no puede seguir bloqueada. El objetivo es desbloquear las conversaciones con el futbolista, que debe entender que lo mejor para su futuro es irse y jugar cada partido, a pesar de tener un sueldo algo menor.

El Barça también podría tener que ceder

Sin embargo, en el Barcelona deben hacerse a la idea de que al final podría tener que ser el club quien ceda y pague la parte de sueldo restante al bosnio. Seguramente no sean más de dos o tres millones brutos, por lo que se seguirían ahorrando 9 o 10. Si la presión ejercida al mediocampista no surte efecto, puede que esta sea la única salida que tengan los barcelonistas para quitárselo de encima.