El 'descarte' del Manchester City que ha sonado para el Barça

El Manchester City está muy cerca de 'romper' el mercado de fichajes con el traspaso de Harry Kane, desde el Tottenham, por una cifra cercana a los 190 millones de euros. Sería un gran golpe sobre la mesa del conjunto dirigido por Pep Guardiola que, aunque tiene grandes estrellas en su delantera, quiere más pólvora para cubrir la salida de Sergio el 'Kun' Agüero, quien llegó al FC Barcelona como agente libre tras no renovar su vínculo con los 'citizens'. 

Lo cierto es que al Barça le convendría muchísimo la llegada del delantero inglés a las filas de los 'skyblues' porque podría ser una vía de escape para Antoine Griezmann, quien sería uno de los jugadores que el Tottenham tiene en su agenda para llenar el hueco de Kane en la ofensiva. Sin embargo, no es el único motivo por el que el Barça estaría atento al movimiento en Inglaterra. 

El diario 'The Sun' ha informado que con la posible llegada del atacante de los 'Spurs' al Etihad Stadium, el club estará obligado a hacer una limpieza en el vestuario y el gran damnificado será Bernardo Silva, un jugador que lleva mucho tiempo en el radar del Barça. El medio británico apunta que el centrocampista ofensivo “habría expresado su deseo de jugar en España”, y así se lo hizo saber al Manchester City, por lo que la puerta de una llegada al Camp Nou se abre, aunque es muy difícil por la situación financiera por la que atraviesa los blaugrana. 

Lo cierto es que hace unos meses el nombre de Silva ya estuvo vínculado con el Barça. Se había informado que los culés y 'sky blues' querían plantear un intercambio de jugadores, en el que pudo haber estado incluido el portugués, pero finalmente los de la Premier League dieron un paso atrás porque sentían que estaban perdiendo más de los que iban a ganar. Silva y Laporte estaban entre los 'escogidos' de Joan Laporta. 

Las diferencias entre el City y Barça 

Aunque al Manchester City no le vendría mal 'deshacerse' de Bernardo Silva, para hacer hueco en la plantilla, no están obligados totalmente a venderlo porque tienen una situación económica mucho más cómoda que la de muchos clubes, incluido el Barça. Este verano han ingresado importantes sumas por los cedidos y las cláusulas de traspasos de Lukas Nmecha (Wolfsburgo), Jack Harrison (Leeds) o Angeliño (RB Leipzig), además del fichaje de Jadon Sancho por el Manchester United, por el que a los 'citizens' le quedaron 11 millones en sus arcas.  

En un caso muy diferente, casi que por el contrario, se encuentra el Barcelona, al que las cuentas no le dan. El club necesita liberar la masa salarial y están en la búsqueda de una fórmula ideal, pero la tarea es más que complicada. Los culés deben vender a un número importante de jugadores, además de rebajar el salario a otros tantos, para así poder inscribir a Leo Messi y el resto de fichajes en la plantilla.