Kylian Mbappé llegó al PSG prácticamente sobre la bocina como el segundo fichaje más caro de todos los tiempos. Y en apenas dos meses ya ha demostrado en el conjunto parisino que su evolución es constante y su techo, ilimitado. Un futbolista dotado de unas condiciones físicas especiales y un talento distinto.

El Barcelona estuvo pendiente de Mbappé prácticamente hasta el último momento, pero se quedó con Ousmane Dembélé. Este miércoles conocíamos, en palabras de Minguella, que el club azulgrana tenía atado al francés por 120 millones de euros, pero la operación finalmente no se llevó a cabo.

"Lo tenía en sus manos cuando se supo que Neymar se iba. Iban a ser 120 millones y otros 30 en extras. Yo hablé con el padre. El chaval, cuando se enteró que Neymar se iba dijo que sólo quería ir al Barça, que no quería ir a París y que al Madrid, con la 'BBC', tampoco iba a ir", espetó Minguella ante la sorpresa de todos.

Minguella reconoce que hubiera sido un bombazo: "Tener un jugador así marca la historia de ocho o diez años. Esto fue el 29 de julio, estando al expedición en Miami para jugar el Barça contra el Real Madrid. Le dije a un íntimo amigo de Bartomeu que le dijera por favor lo que le dije en mayo, que Neymar se va".

Palo a Bartomeu

Para acabar su discurso, Minguella volvió a atizar a Bartomeu: "Yo no tengo nada contra Bartomeu pero es un desastre. Estos son momentos claves. Yo cuando me enteré que este jugador era posible para el Barça y me dieron el teléfono del padre... No llamé en mi nombre ni dije que era el Barça, sino desde Barcelona, que con mi francés se puede entender cualquier cosa. Y entendí perfectamente que a Madrid y a París no quería ir. Al padre y al jugador, jugar con Messi le parecía una locura".