El futuro de Ousmane Dembélé en el FC Barcelona continúa siendo una incógnita. Xavi Hernández ha dejado claro que el francés es un jugador indispensable para su proyecto deportivo, pero las negociaciones para renovarle continúan encalladas pese a la buena disposición de ambos en llegar a buen puerto. Ahora, una nueva información ha desvelado que otro club inglés estaría interesado en ficharle durante el mercado estival.

Según apunta el portal 'www.football.london', el Arsenal se habría sumado a la puja para adquirir los servicios del 'Mosquito' en verano. Los del Emirates Stadium estarían dispuestos a pagar la prima de fichaje que tanto desea su representante y a ofrecer un salario competitivo superior al del Barça. Mikel Arteta, que acaba de firmar su renovación como entrenador hasta 2025, le considera un jugador estratégico y referencial para la próxima temporada.

Con esto sobre la mesa, los 'gunners' estarían 'entrometiéndose' en las pretensiones del Manchester United, que era otro de los integrantes del 'Big Six' que quiere firmar al atacante. La llegada de Erik ten Hag hace soñar a los 'red devils' y ya habrían puesto sobre la mesa una oferta de 12 millones de euros netos por temporada. Sin embargo, Dembélé ha expresado su deseo de continuar en Barcelona, lo que mantiene todo en 'stand by'.

El Chelsea también estuvo tras sus pasos, pero cualquier operación está sujeta al desbloqueo del patrimonio de Roman Abramovich y a la venta del club. De momento, París Saint-Germain, Manchester United y Arsenal serían los clubs que lideran la 'carrera' por 'Dembouz', aunque es importante destacar que los londinenses deberán salir de Nicolas Pépé en la ventana de traspasos para sacar 'tajada' de su venta y liberar espacio en la plantilla.

El Barça no pierde la esperanza

Por su parte, los azulgrana esperan convencer al de Vernon de que renueve y sea el referente ofensivo de la institución. Su entorno se ha reunido en varias oportunidades con Mateu Alemany, pero las posturas se mantienen alejadas debido a que la oferta es demasiado baja para sus aspiraciones. A pesar de que quiere continuar, sus últimas actuaciones no han hecho más que revalorizarle, aunque la dirección deportiva se mantiene al margen debido al historial de lesiones que ha tenido en sus casi cinco años en Catalunya. Xavi confía en él, pero será el tiempo quien dictará sentencia.