Para nadie es un secreto que el Barça tiene una gran cantidad de informes sobre Erling Haaland. La 'joya' noruega ha estado en la 'mira' de los azulgrana desde que jugaba las inferiores del Bryne FK, y posteriormente se fueron acumulando tras su paso por Molde, RB Salzburg y Borussia Dortmund. Todos ha desvelado que sus características son dignas de una estrella y que su paso por Europa dejará una huella en el fútbol mundial.

Todo el seguimiento ha sido extenso, ya que desde muy joven su físico y capacidad goleadora ha despertado el interés de los clubs más importantes del mundo. Sin embargo, hay varias documentaciones que exponen que las cualidades del ariete serían difíciles de encajar en el estilo de juego que quiere imponen Xavi Hernández. Con similitudes al Barcelona de Pep Guardiola, los ojeadores habrían advertido que sería una 'réplica' del fichaje de Zlatan Ibrahimovic.

En el Camp Nou, la figura del delantero centro ha sido ejercido por atacantes con un perfil totalmente diferente al del escandinavo. Jugadores como Luis Suárez, Alexis Sánchez, Samuel Eto'o, Bojan Krkic, Patrick Kluivert y el mismísimo Ronaldo Nazario han vestido la elástica culé y representan un estilo diferente a todo lo que es Haaland hoy en día en el Dortmund.

A pesar de ello, su calidad contrastada y su crecimiento exponencial despejaron momentáneamente todas las dudas en la cúpula del club, a tal punto de que continuaron en la 'carrera' para adquirir sus servicios hasta que sus exigencias económicas se hicieron imposibles de alcanzar. No obstante, después de su últimas lesiones musculares, han salido a la luz varias informaciones que no dejan 'bien situado' al nórdico.

'Amor' por la fiesta

Los ojeadores el FC Barcelona han indagado en la vida personal del '9', y han remitido ciertas valoraciones negativas a la dirección deportiva. Según afirma el diario 'SPORT', ellas apuntan que Haaland "siente una atracción especial por la fiesta y la noche", lo que reseña ciertos comportamientos alejados a las que debería tener un profesional de su nivel. Ante esto hay que tener en cuenta que tiene 21 años, aunque sus continuos menoscabos musculares en los últimos meses no colaboran con la imagen de un futbolista cuyo fichaje está valorado en más de 300 millones de euros.