Tras el título de la Europa League conquistado por el Manchester United ante el Ajax -que mete a los "red devils" en la Champions-, todos los rumores apuntan a que Antoine Griezmann podría desembarcar en la ciudad inglesa la próxima campaña.
Mourinho prefirió no hablar este miércoles del asunto: "Sería irrespetuoso para su actual club, aunque lógicamente hablar de él es hacerlo de un jugador top en Europa", declaró el luso. El delantero del Atlético es ahora mismo el sueño húmedo de Old Trafford, más teniendo en cuenta que la carrera de Ibrahimovic podría haber llegado a su fin.
Y la pregunta que nos hacemos en esta web es: ¿no debería intentar el Barça su fichaje? Se ha hablado largo y tendido de que el tridente necesita un cuarto jugador a su altura para que aparezca en caso de lesión o sanción. Griezmann sería el hombre ideal.
Aunque la MSN se pierde muy pocos encuentros, la irrupción de Griezmann sería muy positiva, permitiendo al Barça reestructurarse con Messi más atrasado y manteniendo la excelencia en la punta de ataque. El francés aportaría desequilibrio, sacrificio y gol. Además, está acostumbrado a tener que buscarse por su cuenta las ocasiones en el Atlético, algo que en el Camp Nou sería distinto, formaría parte de un encaje asociativo que le permitiría brillar más.
Para ello, evidentemente, se necesita reforzar la medular con otro jugador de contención (¿N'Zonzi?). La cláusula de Griezmann, de 100 millones de euros, es prohibitiva, si bien podría intentar reducirse incluyendo a algún jugador en el movimiento.
Reubicar a Messi, antes o después deberá hacerse
Nadie duda de la capacidad goleadora de Leo Messi. Hace unos días ha logrado su cuarta de Bota de Oro, superando nuevamente la cifra de 30 goles en Liga y los 50 en una temporada. Palabras mayores para el argentino, aunque nos tenga acostumbrado a ello.
Pero es evidente que su posición de futuro, viéndolo ya en algunos partidos, es la de jugar más atrasado para poder tener campo por delante con todo lo que ello conlleva -visión de juego, lectura de los espacios, desequilibrio desde atrás...-. "Messi acabará haciendo de Xavi", dijo en su día Guardiola.
Y quizás ese momento esté más cerca de lo que pensemos, aunque cueste verlo actualmente después de su brillante campaña de cara a portería. Pero a lo mejor el Barça necesita ese cambio en su esquema para reinventarse.