El FC Barcelona ha cerrado el ejercicio 2022/23 con cifras que dejan muy satisfecha a la junta directiva que preside Joan Laporta. El presupuesto aprobado por la Asamblea de socios para la temporada pasada había previsto beneficios por el orden de los 274 millones de euros, gracias a los recortes y 'palancas' aplicadas desde el verano pasado. Con varios 'kilos' por facturar del último acuerdo cerrado con Libero Football y NIPA Capital, el balance es positivo.
En ese sentido, la directiva espera contar con el 'ok' de los socios a través de una junta telemática que precederá a la asamblea programada para el próximo 22 de octubre, donde el club presentará oficialmente el presupuesto para la 2023/24 y los números globales del ejercicio 22/23. En principio, el Barça no contempla incluir más 'palancas' esta temporada, más allá del dinero que perderá el club mientras juegue en Montjuïc.
La directiva, satisfecha con el balance económico del último año
Después de un verano de 2022 muy activo por el tema 'palancas', el club ha logrado cerrar una temporada que deja satisfecha a la directiva tanto en lo económico como en lo deportivo. Las ganancias derivadas de los títulos obtenidos por el primer equipo y el Barça Femení se suman a los dividendos que han arrojado recortes importantes en la estructura del club, lo cual ha permitido cerrar el ejercicio con números verdes que se ajustan a lo proyectado.
En el verano 2023, Laporta modificó radicalmente su estrategia para ajustarse a las exigencias de LaLiga, siguiendo lo estipulado en el Plan de Viabilidad aprobado por la patronal para reforzar las plantillas del primer equipo y el filial sin arriegar la calidad de ambos equipos a pesar de las limitaciones del 'Fair Play' financiero. No en vano, el primer equipo solo gastó 3.4 millones de euros en fichajes, con ganancias por el orden de los 105 'kilos' por ventas.
Laporta promete beneficios para la 2023/24
Más allá de no activar nuevas 'palancas' y percibir mucho menos dinero por taquilla, Laporta cree que esta temporada también habrá números verdes en el presupuesto culé, incluso tal vez mayores que la temporada pasada, considerando que el club no deberá vender más partes de su patrimonio para cuadrar cuentas y, además, la inversión en el proyecto Espai Barça comenzará a dar dividendos desde finales de 2024. Así las cosas, el club sigue por bien camino en la búsqueda de salir de la crisis y recuperar el equilibrio financiero que permita fichar futbolistas sin tantos problemas.