Puede que Andrés Iniesta no cuajara una buena temporada 2016-17, y que haya empezado algo renqueante y sin ritmo de competición en los primeros duelos de la temporada 2017-18. Sin embargo, la realidad es que, después de la buena actuación que firmó contra el RCD Espanyol en Liga Santander, este martes Andrés Iniesta volvió a demostrar que poco a poco está recuperando el nivel que se espera de él.

No en vano protagonizó en la primera mitad del encuentro contra la Juventus de Turín, en el estreno del Barça en la Champions League 2017-18, una jugada en la que se marchó de hasta tres defensores del conjunto rival hasta ser derribado por Matuidi en la frontal del área.

Los regates de Iniesta levantaron al público del Camp Nou de sus asientos, pero lo cierto es que no sólo aportó pinceladas de magia Iniesta, sino que a lo largo de los noventa minutos mostró un juego de control, posesión y distribución que permitió al Barcelona dominar el partido de principio a fin contra la Juventus de Turín, sin dar opción a los 'bianconeri' a excepción de algunos contragolpes aislados.

Andrés Iniesta está de vuelta

Iniesta demostró, por otra parte, que atraviesa en estos momentos un gran momento físico al haber protagonizado tres partidos seguidos rindiendo a un gran nivel en los últimos días, sumando a los duelos ante Espanyol y Juventus el último que jugó con la selección española contra Italia.

Andrés Iniesta está de dulce, y el FC Barcelona debe aprovecharlo. Ernesto Valverde deberá dosificarle en las próximas fechas para que no se le agote el físico, pero lo que nunca se le acabará es una magia que lleva pegada a las botas desde siempre. Con Iniesta en buena forma, el FC Barcelona es todavía más peligroso de lo que lo es normalmente. Y este martes volvió a quedar demostrado.