Ansu Fati, para sorpresa de muchos, jugará en el Brighton hasta el 30 de junio de 2024. La operación ya ha sido anunciada por el FC Barcelona y representa una cesión impensable cuando el delantero se convirtió en el elegido del Barça para comenzar la era post-Messi con el '10' en su espalda hace solo dos años, pero el proyecto de Xavi parece no tener tiempo ni lugar para seguir esperando la recuperación total del extremo. 

El movimiento es un retrato claro de cómo ha cambiado su papel en el club azulgrana, sobre todo después que el jugador de 20 haya perdido la explosividad de sus inicios, junto a un atrevimiento que definía su juego entre 2019 y 2021. Ahora su cesión al Brighton debe servir en gran parte para ver hasta dónde puede llegar el físico de Ansu y si puede volver a demostrar que está para jugar al máximo nivel con regularidad.

El Barça deberá seguir de cerca para ver si hay evolución de Ansu

Y es que a la lesión de menisco en 2020 le seguirían varias lesiones musculares y un debate médico después que Fati terminara optando por evitar el quirófano. Aunque no ha vuelto a sufrir ninguna muscular grave, tampoco ha alcanzado el nivel de sus inicios en el Barça, por lo que su cesión también representa un reto para ver si demuestra que puede jugar cada semana, teniendo en cuenta además el nivel físico tan exigente de la Premier League.

El escenario ahora mismo para el jugador parece ideal para jugar con al menos de presión, en un sistema donde sí pueda ser protagonista y donde su principal meta sea volver a recuperar sensaciones de cara a un 2024 en el que podría regresar al Barça de Xavi con otros galones. Sin embargo, sí que podría ser la última ventana que tendrá Ansu para continuar el plan que muchos tenían hace un par de años con él y la posibilidad de que triunfe como azulgrana.

Un futuro poco prometedor para el canterano culé

Por el lado contrario, si no es su año y sigue un poco como en el Barça durante el último año, seguramente volverá con menos valor y es poco probable que se quede en la plantilla del míster egarense. Además, de poder permanecer en el club catalán tendría aún más complicado ganarse una titularidad que ya el curso anterior no consiguió y en el actual curso continuó siendo una historia similar.