Francisco Trincao llegó al FC Barcelona a cambio de 31 millones de euros como una de las grandes estrellas jóvenes emergentes en Europa. El luso brilló con el Sporting de Braga con solo 20 años y los culés se hicieron con él con la esperanza de que pueda convertirse en un jugador importante en el futuro. Pero esa ilusión que generó su llegada se ha ido convirtiendo en decepción a medida que han ido pasando los meses.
El extremo no termina de explotar y hasta ahora no ha marcado ni un solo gol con la camiseta del Barça. Su hoja estadística se limita a una asistencia para el golazo de Leo Messi contra Osasuna desde fuera del área. Por este motivo, la afición le pide más y Ronald Koeman, según cuenta el diario 'Sport', llegó a darle un tirón de orejas después del encuentro de los azulgrana ante el Cornellà en Copa del Rey.
En ese duelo, el de Viana do Castelo fue titular y tuvo 74 minutos para demostrar que el Barcelona no se equivocó pagando más de 30 'kilos' por él. Por desgracia, el atacante no dio el nivel y se mostró poco incisivo por banda derecha. Apenas generó desequilibrio, que en teoría es su mayor fuerte, y tuvo que ser sustituido por Ousmane Dembélé en el segundo tiempo. Una decepcionante actuación que le valió una 'bronca' de su entrenador.
En 'Catalunya Ràdio' aseguran que el míster se reunió expresamente con Trincao tras el duelo para dejarle claro que debe dar más. El ex seleccionador de Holanda le pidió ser mucho más atrevido y mostrarse más decidido a la hora de ir hacia la portería contraria. El preparador le dejó claro que confía en él y que va a seguir teniendo minutos, pero le dejó claro que tiene que dar un paso al frente en su juego.
Trincao, más incisivo y decidido ante Elche y Rayo
Estas palabras parecen haber tenido un efecto tremendamente positivo en el ex del Braga, que ha encadenado desde entonces dos partidos consecutivos dejando mejores sensaciones. Contra el Elche, en Liga, el portugués jugó algo más de un cuarto de hora en el segundo tiempo y estuvo a punto de marcar en dos ocasiones. Se le vio mucho más decidido, como pidió Koeman, y si no llega a ser por el portero de los ilicitanos se habría estrenado por fin con la camiseta blaugrana.
Tras esos 'chispazos', el entrenador barcelonista volvió a confiar en él en Copa contra el Rayo. Aunque no marcó, no se escondió en ningún momento y estuvo presente en muchas de las llegadas de las que gozó el Barça. En esta ocasión sí buscó el desborde siempre que pudo y volvió a quedarse cerca de marcar con un buen disparo que le paró el arquero. En resumen, mostró esa decisión que se le pedía y que tan bien podría venirle al Barcelona en lo que resta de temporada.