POR LA PUERTA DE ATRÁS
Caso Arthur: Otra mala gestión en Can Barça
Publicación:13/08/2020 - 17:25h
Actualización:13/08/2020 - 19:24h
El 'Caso Arthur' ha sido la enésima polémica extradeportiva que ha vivido el FC Barcelona esta temporada 2019-20, y una de las que ha generado más debate entre la afición culé
Días complicados los que se siguen viviendo en Camp Barça y que de nuevo no tienen que ver con el fútbol. La gestión extradeportiva de los dirigentes del club blaugrana sigue siendo para hacérsela mirar y las decisiones que acaban tomando futbolistas como Arthur Melo también. Al margen de que el jugador tenga una forma de comportarse inadmisible y un porcentaje de responsabilidad muy alto en una situación enquistada por completo, algo ocurre en el Barcelona para que el chicle llegue a estirarse tanto. Porque estas cosas ya no sorprenden.
Todo ello de nuevo motivado por una mala gestión del club, que sigue apostando por cuadrar presupuestos y llegar a sus objetivos económicos a través de la venta de futbolistas que no terminan de cuajar. Nadie quería ser el conejillo de indias de la operación salida que se aproximaba en el Barça y digamos que Arthur ha sido empujado a salir cuando el jugador ni se lo planteaba.
Cuando empezó a aparecer en las quinielas de una posible marcha, pocos lo creían. “Sorprendió ver que las casas comenzaron a incluir a Arthur en sus mercados de traspaso de jugadores para la próxima temporada. No era algo habitual teniendo en cuenta el poco tiempo que llevaba en el club", comenta para este medio Antonio Caro, editor jefe del medio especializado casasdeapuestas.bet. Pero así era.
Tal es el desgobierno que hay en la cúpula y la falta de autoridad, que de nuevo el manejo de este tema ha sido horripilante y ha provocado que Melo tome la peor decisión posible. Vendido a la Juventus como parte del trato por la firma de Pjanic, el brasilero ha tenido claro que no se iba a enfundar la camiseta del Barcelona ni un día más y que le declaraba al club una guerra que ya veremos como termina.
Ahora enfocados en el presente, tenemos objetivos importantes en Barcelona y voy a seguir hasta el final dándolo todo: por mis compañeros y todos los aficionados. Moltes gràcies pel suport! Fins demà. ??
— Arthur Melo (@arthurhromelo) June 29, 2020
De poco sirvieron sus buenas palabras previas al inicio de la Champions. Solo humo. Y tampoco es que Quique Setién haya sido el pacificador que se podía esperar. El santanderino lanzó un órdago al jugador en la previa de un encuentro frente al Celta que terminó de dinamitar la situación. Razón no le faltó al técnico azulgrana, pero ayudar tampoco ayudó cuando le hizo jugar los minutos de la basura de un partido en el que el Barcelona se dejó dos puntos muy importantes de cara a la liga.
Desde ese momento, desaparición total de Arthur, escondida entre suplencias y lesiones que para Setién fueron inexistentes. En la última jornada de liga en Vitoria, para el técnico se borró de aquel choque, en el que por cierto se recordará al brasileño por aquel bostezo en mitad del encuentro. Todo mal. Y la conversación postpartido entre jugador y técnico no debió ser demasiado buena porque hizo perder a Melo el poco respeto que le quedaba por el Barça.
El pasado 27 de julio, Arthur no se presentó a la vuelta a los entrenamientos previos al inicio de la Champions ni pasó su correspondiente PCR. De hecho, ni se movió de Brasil. Ya no había manera de volver atrás y los abogados del jugador serían los que tomarían la palabra con el club a partir de ese momento. Las charlas terminaron con la directiva abriendo un expediente disciplinario al futbolista y con los letrados exigiendo llegar a un acuerdo para rescindir el contrato y que Arthur dejara de pertenecer de forma oficial a la entidad.
El jugador finalmente cedió y volvió, está apartado del equipo sin viajar a Lisboa, pero ahora queda pendiente una reunión entre las dos partes para tratar de llegar a un acuerdo. Las mazmorras del Camp Nou de nuevo repletas, por si no lo estaban ya.