EL BARÇA DEBE CAMBIAR MUCHO
Los datos de la vergüenza: de la media de edad al mapa de calor de Suárez
Publicación:16/08/2020 - 10:59h
Actualización:16/08/2020 - 10:59h
Durante la goleada sufrida por el FC Barcelona contra el Bayern Múnich, se dieron algunas estadísticas que sin lugar a dudas ponen la planificación culé en tela de juicio
El Barcelona protagonizó contra el Bayern Múnich un ridículo histórico, de aquellos que sirven para poner punto y final a un ciclo. El 2-8 que los bávaros infligieron a los culés dejó varias estadísticas para el recuerdo, aquellas que duele mirar pero que, si se analizan bien, pueden ofrecer respuestas a aquellos aspectos que el club deberá mejorar en los próximos años.
Una de ellas fue el mapa de calor de Luis Suárez. El ariete charrúa marcó un gran gol, pero durante el resto del partido pasó casi desapercibido y prueba de ello es que tan sólo dio 24 pases. Nueve de ellos fueron para sacar desde el centro del campo, en el saque inicial y después de cada uno de los goles del Bayern Múnich en el Estadio Da Luz de Lisboa.
Un mapa de calor que dejó el punto del centro del campo como el lugar donde Luis Suárez más se desempeñó, reanudando el juego después de cada pequeño fracaso de su equipo. También relacionada con Luis Suárez, aunque de forma algo más indirecta, está la otra estadística triste que deja claro que el FC Barcelona debe trabajar urgentemente en una remodelación de la plantilla.
Se trata de la media de edad del equipo titular: con casi 30 años, fue el once del Barça más veterano en la historia del Barça en la Champions League, debido al regreso de Sergio Busquets y a la inclusión de Arturo Vidal en la alineación.
El Barça, obligado a remodelar la plantilla
A pesar de que tampoco es una mala media de edad para rendir a las mil maravillas sobre el terreno de juego, y que tiene a favor el aspecto de la experiencia, el hecho de que el once titular del Bayern fuese ostensiblemente más joven sirve para entender por qué los bávaros se emplearon con tantísima energía durante los noventa minutos, mientras que los jugadores culés parecían muñecos rotos.
El FC Barcelona está obligado a reflexionar profundamente y, a partir de ahí, tomar decisiones que afecten al futuro de la plantilla culé. Será necesario prescindir de algunas 'vacas sagradas' y de jugadores cuya presencia en el Barça ya no da más de sí, para fomentar la llegada de futbolistas jóvenes y en trayectoria ascendente, que puedan ofrecer los mejores años de su carrera en el Barça. Para eso habrá que tener paciencia: no se puede fallar.