Dembélé-Ansu Fati: el debate que se viene en el Barça

Este verano, el FC Barcelona apostó por Ousmane Dembélé como gran 'fichaje' tras el fracaso en la operación Neymar. Acompañado por futbolistas como Leo Messi, Luis Suárez o Antoine Griezmann, se esperaba que el francés explotase de forma definitiva para convertirse en un futbolista clave, debido al enorme talento que atesora, de sobras conocido.

Lamentablemente, otra inoportuna lesión le ha apartado de los terrenos de juego en el tramo inicial de LaLiga y lo peor es que sus problemas físicos ya empiezan a ser una rutina, algo que le resta mucha continuidad. Además, Dembélé se encontrará esta temporada con un problema añadido que no tuvo en años anteriores: el talento de la Masia.

Inicialmente, Carles Pérez pisaba fuerte para intentar abrirse hueco pero ahora, además, existe la irrupción de Ansu Fati, al que le han bastado tres partidos, dos goles, una asistencia y un repertorio de recursos técnicos digno de un superclase para enamorar al Camp Nou y convertirse en un futbolista muy importante.

A nivel futbolístico, el de Guinea Bissau es un futbolista con unas virtudes calcadas a las de Dembélé: gran velocidad, calidad para desbordar, capacidad goleadora, golpeo con las dos piernas... Y el mayor problema para el francés es que Ansu Fati, con apenas 16 años, parece un jugador más maduro que él. Ahora, el 'mosquito' volverá de su lesión y el debate estará abierto.

Un Dembélé más profesional

En temporadas anteriores, algunos miembros de la plantilla reprocharon a Ousmane Dembélé su actitud pasota e incluso poco profesional. Sin embargo, durante la pretemporada, 'pesos pesados' como Sergio Busquets aseguraron estar asombrados por la actitud con la que el extremo francés había vuelto, mucho más positiva y centrada.

Ansu Fati tiene 16 años y los técnicos deben gestionar bien la situación para asegurarle el mejor futuro posible, evitando que se convierta en otra promesa que se acaba estrellando. Eso sí, su rendimiento es espectacular y Valverde no dudará en usarle si le necesita. Así las cosas, Dembélé debe ponerse las pilas y tratar de tener continuidad si las lesiones le respetan. Pese a su talento, ahora su puesto está amenazado.