Dembélé llega muy justo y correrá un gran riesgo si juega la Champions

Quique Setién mantiene viva la esperanza de poder contar con Ousmane Dembélé antes de que termine la participación del FC Barcelona en la Champions League 2019-20, pero la realidad es que incluso el técnico cántabro es consciente de que será una decisión arriesgada. El Barça jugará ante el Nápoles cuatro días antes de que se cumplan los plazos marcados para la recuperación del atacante galo, y no se prevé que para dicho partido 'Dembouz' pueda estar disponible de ninguna manera.

Sí podría estarlo para el choque del día 14 de agosto, si el Barcelona avanza a cuartos de final, presumiblemente con el Bayern Múnich como rival. Lo malo es que hará muy pocos días de la recuperación total del joven futbolista, y que su primer partido post-lesión sea un partidazo de máximo nivel ante el gran favorito para ganar esta Champions League podría ser una decisión cuanto menos arriesgada.

Bien sabido es que Dembélé es propenso a recaer de sus lesiones, y si hace más esfuerzos de los habituales en el primer partido tras su recuperación, después de meses sin jugar y sin tener ritmo de competición, la recaída sería más que probable. Por tanto, y a pesar de que podría acabar disponiendo de unos minutos en Liga de Campeones en función de hasta dónde llegue el Barça, a día de hoy la participación de Dembélé está en el aire.

Quique Setién contará además con Leo Messi, Luis Suárez, el ya recuperado Antoine Griezmann y Ansu Fati, la gran revelación de la temporada y un extremo que, además, puede cumplir la función desequilibrante de Dembélé en la banda izquierda. A no ser que sea estrictamente necesario, en este sentido, lo más probable es que 'Dembouz' no aparezca sobre el césped.

Dembélé sabe que no tiene más oportunidades

Si es así, se concentrará en llegar a la próxima temporada 2020-21 lo mejor posible a nivel físico y mental, consciente de que no puede volver a lesionarse de larga duración en un buen periodo de tiempo si quiere empezar a recuperar el terreno perdido entre la afición culé, la mayor parte de la cuál ya le ha puesto la cruz desde hace meses.

Dembélé aún sigue decidido a triunfar en el Barça, pero para conseguirlo deberá fortalecerse como nunca y convertirse en un futbolista regular sobre el campo. ¿Lo conseguirá? Si no es así, el Barcelona podría fomentar una posible venta de cara al verano de 2021, siempre y cuando haya algún club dispuesto a lanzar una buena oferta por sus servicios.