Ousmane Dembélé es un jugador bastante impredecible dentro del terreno de juego y que, aunque tiene una velocidad impresionante y desequilibra a cualquier rival, siempre le ha discutido que acierta muy poco en las decisiones que toma en el campo. Ante el Osasuna, en una noche espectácular del francés, dejó atrás cualquier fantasma e hizo olvidar al Camp Nou los pitos. 

En este momento no tendría sentido algo silbar, abuchear o pitar a Dembélé. Todo lo contrario. Ha venido cuajando actuaciones muy positivas y demuestra su compromiso con el FC Barcelona mientras tenga contrato. Fue una promesa que le hizo a Xavi Hernández y, hasta ahora, ha cumplido al pie de la letra. Este domingo dejó dos asistencias para igualar a Jordi Alba como máximo asistente culé en LaLiga (7) y en el segundo tiempo dejó la sensación de que también quería su gol. 

No llegó su tanto, pero sí continuó la sensación de peligro cada vez que se hacía con el balón. Fue clave para dar amplitud al Barça por la derecha y desequilibrar a la defensa rival, para terminar poniendo dos 'caramelos' a Ferran Torres y Aubameyang en el área. Los dos lo aprovecharon y golearon. Joan Laporta lo miraba desde el palco. 

¿Tendría que renovar Dembélé? Probablemente al final de temporada se despeje la 'X', pero de momento deja la sensación de que, si hay oportunidad, el Barça debería hacer un esfuerzo extra. No hay pistas por parte del jugador, porque es tan impredecible fuera del campo como lo es dentro, pero desde el palco lo miran de reojo. 

"Lo que tenga que pasar pasará", decía Jordi Cryuff sobre la continuidad del galo en el equipo, sin querer 'mojarse'. La relación del club culé con el entorno sigue siendo hostil y es improbable que en este momento se sienten a negociar, si es que hay posibilidad, pero no se descarta nada: hay quienes dicen que la puerta está cerrada con candado, pero otros que creen que han quitado el cerrojo y comienza a abrirse. 

Sin repetir errores

No hay certezas con Dembélé, eso está claro. Nadie sabe si quiere quedarse, si la idea de Xavi lo ha 'enamorado', pero sí que está cumpliendo con lo que ha prometido y también que, hasta ahora, no ha firmado con ningún otro equipo. Lo tendrá en secreto o no habrá nada, aunque no hay muchas opciones: PSG o Juventus... descartando a un Chelsea en crisis. 

Desde el Barça, si se abre la puerta, impondrán sus condiciones y es probable que no cambien su oferta. Es eso o dejarlo ir sin dejar un euro. El tiempo y desenlace final de la temporada, a la que le quedan poco más de dos meses, dirá cuál es la mejor opción.