Cuando Dembélé salta al campo desde el banquillo, rinde

Ousmane Dembélé presenta su mejor promedio goleador desde que se convirtió en futbolista profesional. Con Ronald Koeman al mando del banquillo del FC Barcelona, el francés está en 0,36 goles por partido disputado, un poco por encima del buen promedio de su segundo año en el Barça. Mientras que con Ernesto Valverde como técnico, en la temporada 2018-19, anotó 14 goles en 42 compromisos y sus tantos fueron claves para la consecución de la segunda Liga consecutiva para el equipo.

Lo sorprendente es que de los seis tantos que Dembélé ha anotado esta campaña, en la mitad de los casos han llegado cuando ha saltado a la alfombra verde desde el banquillo de suplentes como revulsivo. Es el cambio que más ha convertido goles, por delante de Lionel Messi (2) y Pedri, Riqui Puig y Antoine Griezmann (1). Dembélé marcó el quinto ante el Ferencavaros, en un partido que ya estaba ganado, pero empató ante el Eibar donde entró en el descanso, y anotó en Cornellà en la prórroga para concederle el boleto a octavos de final de la Copa del Rey al Barcelona, partido al cual ingresó también durante el entretiempo.

En este Barça – dejando al costado a Messi – nadie tiene su osadía, ni su regate, ni su disparo. Cuando el delantero francés es titular, es menester aprovechar más estas características, sin temor al fallo. Por supuesto, si lo hace con dos pases sencillos como en Elche, el técnico se ve en la necesidad de sacarlo del campo con el fin de asegurar el resultado.

Desde su regreso al equipo tras superar la lesión que lo mantuvo de baja por tiempo prolongado, Dembélé ha sido clave para la consecución de triunfos importantes para el equipo, ejemplo de ello es el mencionado ante el Cornellà en dieciseisavos de final de la Copa del Rey, partido que fue trabado durante los 90 minutos gracias a la gran participación del guardameta Ramón Juan, que tapó un par de penales para ahogar el grito sagrado del conjunto azulgrana.

Dembélé, fundamental en el ataque del equipo

En medio de la crisis institucional y deportiva que atraviesa actualmente el Barcelona, Ousmane Dembélé ha sido una de las piezas que se ha dado la tarea de defender la camiseta azulgrana con honra y vigor, marcando goles apremiantes que han servido para rescatar al conjunto del abismo al que se habían sumido al inicio de la temporada. Su aporte es innegable, así como sus ganas de superarse día a día.