Pese a que el FC Barcelona no cuajó para nada una buena primera mitad frente al Málaga en La Rosaleda, cierto es también que el colegiado del partido, Gil Manzano, dejó de pitar dos posibles penaltis a favor de los de Luis Enrique, uno de ellos en el minuto 12 y el otro en el 38.
El primero de ellos llegó tras una gran jugada colectiva del Barça que culminó Leo Messi con un pase al interior del área hacia André Gomes. El centrocampista portugués se durmió a la hora de rematar y uno de los defensores, Rosales, llegó rápidamente para poner el cuerpo y chocar directamente con él, derribándole.
Algunos podrían pensar que se trataba de una carga legal, pero la repetición dejó claro que el jugador del Málaga se dirigió directamente hacia el futbolista del Barcelona, sin voluntad de disputar el balón.
El segundo caso, sin embargo, fue más flagrante aún. Y es que, a la salida de un córner, Jeremy Mathieu se elevó para rematar pero no pudo hacerlo del todo debido a un fuerte agarrón del dorsal número 5 del Málaga, que impidió el remate del francés estirándole de la camiseta.
Gil Manzano, el colegiado que benefició al Real Madrid
La cuestión es que Gil Manzano decidió no pitar penalti en ninguna de las dos acciones, beneficiando de esta manera a los locales. Cabe recordar que se trata del mismo árbitro que favoreció al Real Madrid esta temporada "regalándole" cinco puntos que no merecía frente a Villarreal y Málaga. Contra el "submarino amarillo" se inventó un penalti por mano involuntaria de Bruno Soriano dentro de área, entre otras acciones como por ejemplo una falta no pitada de Isco Alarcón en la jugada del gol definitivo de los blancos (2-3).
Frente al Málaga, en el Santiago Bernabéu, dio por válido un gol de Sergio Ramos en claro fuera de juego que a la postre acabó significando el triunfo merengue ante los andaluces (2-1), precisamente el rival al que se enfrentó el Barça este sábado.