Contra el Getafe, quedó demostrado que al FC Barcelona todavía le queda mucho por mejorar. Buena primera parte de los de Ronald Koeman pero, en cuanto los azulones se emplearon en defensa en el segundo tiempo y usaron sus malas artes para atascar el partido, los culés desaparecieron. No obstante, no todos los jugadores del cuadro catalán quedaron igual de tocados.
Hay dos, en especial, dieron un rendimiento muy bajo que empeoró incluso el que estaban dando hasta la fecha. Esta semana se estrena la Champions League y, en menos de una semana, llega el duelo contra el Real Madrid en el Clásico del Camp Nou. Después del partido contra el Getafe, hay dos jugadores que no parecen tener para nada el puesto asegurado en el duelo con los blancos: Antoine Griezmann y Frenkie de Jong.
Antoine Griezmann
Después de brillar con la selección francesa y de dejar caer que con los 'bleus' juega bien porque Didier Deschamps sí le coloca en su posición, contra el Getafe Ronald Koeman le acercó más al área para tratar de potenciar sus virtudes. Pero Antoine Griezmann siguió en la misma línea que hasta ahora: no aportó absolutamente nada al juego colectivo y, para agravarlo más, mandó el balón a las nubes en un mano a mano con el portero rival que podría haber cambiado el partido.
Ya sea por la posición o por la presión que siente cuando juega con el FC Barcelona, Antoine Griezmann demostró que está en un momento de forma pésimo. La pasada temporada no convencía con su rendimiento pero, al menos, aportaba goles, pero ahora ni eso: lleva cero en cuatro partidos. No sorprendería que empezara en el banquillo contra el Real Madrid porque Pedri, Francisco Trincao o hasta Ousmane Dembélé parecen poder aportar mucho más que él.
Frenkie de Jong
La paciencia se está agotando hasta que hay una premisa que se ha acabado haciendo evidente: Frenkie de Jong no está para ser indiscutible con Ronald Koeman. Sus primeros partidos en LaLiga fueron muy flojos, pero contra el Getafe, además de mostrarse poco fino, tocó fondo cometiendo un penalti absurdo sobre Djené que acabó condenando al FC Barcelona.
A día de hoy, Sergio Busquets está mucho mejor que él y, si Miralem Pjanic se pone en forma en la semana previa al Clásico, lo lógico sería que fuese el bosnio quien acompañase al canterano en el doble pivote. Tal vez, sea el momento para sentar a un Frenkie de Jong que lleva dos partidos para olvidar y que, aunque no genera dudas en lo prometedor que es su futuro, sí las genera sobre la capacidad que tiene ahora mismo para mejorar su versión en un partido tan importante.
Las reacciones tras el Getafe-Barça