Después de dejarla a medias en el pasado mercado estival, el FC Barcelona afronta la llegada del invierno pensando en finiquitar su operación salida. A pesar de todo, hasta enero podría haber novedades, y una de ellas sería la permanencia de uno de los señalados como posible descarte de los azulgrana.

Thomas Vermalen tendría asumida su marcha del club, aunque parece ser que se producirá algo más tarde de lo esperado. Tal y como apunta 'Mundo Deportivo', el belga la habría aplazado hasta junio de 2018, aparcando finalmente lo que parecía acordado como una despedida amistosa en enero.

Aunque su intención es acumular minutos para llegar en forma al Mundial de Rusia, el jugador habría aceptado el trato tras hablar con Ernesto Valverde, que no quiere debilitar una plantilla que considera que se quedaría corta de centrales. El Txingurri le dará partidos a lo largo del curso buscando el beneficio de ambas partes, y a final de temporada, con más tiempo para buscar relevos, se afrontará su venta.

Falta uno más

Lo que sí parece claro en el Barça a estas alturas es que Valverde pretende ampliar la nómina de centrales más pronto que tarde. Aun asegurándose la continuidad de Vermaelen, el técnico preferiría que llegara otro futbolista en el mercado invernal, para reforzar una posición que considera en peligro debido a los posibles contratiempos que la pueden afectar a lo largo de la temporada.