POSICIONES INDEFINIDAS
El experimento de Koeman con Leo Messi y Griezmann
Publicación:18/10/2020 - 23:17h
Actualización:19/10/2020 - 17:34h
Ronald Koeman insiste en que Leo Messi y Antoine Griezmann intercambien constantemente sus posiciones, una táctica que hasta ahora no ha sido efectiva
Ronald Koeman es un entrenador de ideas fijas y llegó al FC Barcelona con un esquema mental muy claro de lo que quería implantar en el equipo. Además de un cambio de rutina total con unos entrenamientos de mayor intensidad, el técnico holandés optó por emplear el mismo dibujo táctico que cuando dirigió a la selección de los Países Bajos: un 4-2-3-1 que hasta ahora ha sido innegociable para él.
Según Ronald Koeman, los jugadores del FC Barcelona son ideales para jugar con este esquema de juego. También ha dejado claro qué rol tendrá cada jugador en el equipo, con premisas fundamentales como que Philippe Coutinho debe jugar como mediapunta, que Frenkie de Jong debe ser pivote y que, a falta de Memphis Depay, no hay un delantero centro que ocupe la posición de manera continuada.
Cuando parecía que Messi y Griezmann encajaban
Dentro de esta última idea, aparecen dos nombres clave: Leo Messi y Antoine Griezmann. Hasta el momento, la idea de Ronald Koeman ha sido la asimetría, con Ansu Fati en la izquierda, Philippe Coutinho por el centro y el astro argentino permutando la posición con el francés para generar desconcierto en las defensas rivales y hacer que no tengan una referencia clara de marcaje.
Ansu Fati y Philippe Coutinho sí han encontrado su sitio pero, hasta el momento, lo que no ha funcionado ha sido el experimento de intercambios constantes entre Leo Messi y Antoine Griezmann. Y no solamente se debe a que el francés esté rematadamente desacertado en todas sus acciones, sino que el capitán azulgrana tampoco parece acabar de sentirse cómodo o entender el rol que Ronald Koeman pretende darle.
Dos casos distintos
Durante el parón de selecciones internacionales, Antoine Griezmann dejó caer que juega bien con Francia porque Didier Deschamps sí sabe dónde ponerle. El problema es que, por mucho que Ronald Koeman le dé libertad para llegar al área, cuando juega en el FC Barcelona parece no aguantar el peso de la presión. Participa poco en la elaboración y, lo que es peor, desperdicia las pocas ocasiones de las que dispone.
Tampoco vemos al mejor Leo Messi jugando en esa permuta entre el falso '9' y la banda derecha. Al argentino le cuesta ser la referencia arriba porque pide el balón al pie y también generar peligro cuando tiene tan encima a la defensa. De hecho, las ocasiones más claras las genera cuando baja a recibir o cuando aparece para rematar desde segunda línea. Y es precisamente por esa naturaleza de segundo punta que tienen ambos que Ronald Koeman ve prioritario a Memphis Depay.