Antoine Griezmann sigue sin despegar en el FC Barcelona y ya hace más de un año que aterrizó en el Camp Nou. La primera temporada del francés en el Barça fue decepcionante a nivel futbolístico, pero al menos convirtió 14 goles, una cifra muy por debajo de su nivel, pero aceptable teniendo en cuenta que era el año de su estreno y que jugó fuera de posición durante buena parte del curso.
Pero después de ese año de adaptación, al galo se le exige esta temporada que sea la estrella que lideró a la Francia campeona del mundo y al Atlético de Madrid. Ronald Koeman aseguró que su intención era hacer que el de Macon se sintiera cómodo y que sacase su mejor fútbol. Para ello, le sacó de la banda izquierda y le ha colocado en la derecha, donde ha jugado los tres encuentros que van de Liga.
Pero ni siquiera el cambio de puesto ha mejorado el rendimiento de un Griezmann que sigue sin dar ese paso que se le pedía. Frente al Celta de Vigo fue sustituido al descanso tras la expulsión de Clément Lenglet y este pasado domingo, contra el Sevilla, volvió a ser cambiado por su bajo rendimiento. El delantero apenas intervino en el juego de los suyos y pasó sin pena ni gloria por el encuentro.
Griezmann no termina de encajar en el Barça
La situación del internacional 'bleu' es muy preocupante, ya que no se puede decir que le esté faltando actitud. Él lo intenta y este domingo tiró infinitos desmarques de ruptura que ninguno de sus compañeros vieron. Da la sensación de que sigue sin haber 'feeling' entre él y los demás, ya que les cuesta entender su fútbol. En el Atleti se hizo grande jugando al espacio y aprovechando su velocidad e inteligencia en sus movimientos, pero en Barcelona eso no le sirve de nada.
Además, falló las dos oportunidades de gol que tuvo por malos controles, algo extraño en un futbolista que solía ser letal cuando encaraba la meta rival. Por todo ello, Koeman parece estar cada vez más desesperado con él y con su nivel de juego. "Hoy ha tenido dos oportunidades y, por su calidad, tendría que haber marcado en alguna de esas dos jugadas", dijo el entrenador barcelonista en rueda de prensa.
Koeman podría sentar a Griezmann por Trincao
La paciencia del holandés se está agotando poco a poco, y no sería de extrañar que si en un par de partidos Antoine sigue sin explotar, el de Zaandam decida sentarle y apostar por Francisco Trincao, por el que parece sentir especial predilección. El luso se está ganando la confianza del ex seleccionador de Holanda poco a poco y podría ser una solución de urgencia si el ex rojiblanco no despierta. El tiempo dirá si Griezmann coge este tren o termina perdiéndolo definitivamente.