Griezmann, pletórico: Planta cara a los jóvenes del Barça

Antoine Griezmann se convirtió en jugador centenario con el FC Barcelona en el partido ante la Real Sociedad este domingo. El francés arrancó su tercera campaña como barcelonista, alcanzando su partido oficial número cien como jugador del club azulgrana, y no lizo por todo lo alto, desempeñando un gran papel en la goleada del Barça (4-2) en su estreno en LaLiga 2021-22.

Partiendo desde la banda derecha, Griezmann realizó un despliegue físico impresionante, al que añadió una buena química con el resto del equipo para combinar y ser un nexo de enorme valor entre la medular y la punta de ataque. La conexión más destacada sin duda fue la que ejecutó con Memphis Depay, que una vez más fue destacada e ilusiona de cara al futuro.

Griezmann estampó su sello en el partido gracias a su nivel de juego, y también por la capacidad de resistencia física que exhibió sobre el césped del Camp Nou. Al francés se le vio fresco y fuerte. El cúmulo de esfuerzos de la pasada campaña definitivamente no le ha pasado factura, en una demostración plena de su potencial.

Sin hacer mucho ruido, el delantero del Barça fue el cuarto jugador del fútbol mundial que más partidos disputó en la temporada 2020-21. Griezmann participó en 68 encuentros, 51 con el Barça y 17 con la selección francesa. Solo fue superado por Pedri González (73), Bruno Fernandes (72) y Mason Mount (69). El valor agregado de Antoine es alcanzar los 68 partidos a los 30 años. Ningún otro jugador de su edad lo logró. Pese a este increíble esfuerzo, volvió a desempeñar su pletórico nivel en el aspecto físico como se vio frente a la Real Sociedad.

El análisis sosegado posterior al partido fue el factor que reveló su amplio desgaste. El mapa de calor demostró que el francés había recorrido todo el flanco derecho constantemente, desde el área rival al área propia. A ello, añadió desmarques en diagonal y rupturas por el centro. Participó en los contragolpes al final del partido y fue incombustible.

Positivo

La actitud de una estrella como Griezmann fue el mejor ejemplo de lo que Ronald Koeman desea para su equipo y para los jóvenes jugadores. El francés no se ha aprovechado de sus galones de campeón del mundo ni mucho menos, echó una mano de forma constante tanto a Sergiño Dest como, sobre todo, a un Emerson Royal que salió al campo un tan descolocado.

Griezmann siempre se ha puesto al servicio del equipo, y éste es precisamente el valor que Koeman quiere potenciar más actualmente en su conjunto de dirigidos. Por tanto, el francés es un futbolista fundamental y el técnico holandés le ha transmitido su plena confianza, incluso cuando más sonaba la opción de un trueque con el Atlético de Madrid. Y más ahora tras la partida de Lionel Messi. Ahora, nadie se puede imaginar este Barça sin Griezmann. Su facilidad para entenderse con los compañeros y la generación de buen ambiente son factores que no pueden perderse.